Muchas vivencias de la etapa del estado de alarma por el coronavirus, aunque eran conocidas de una forma genérica, están difundiéndose ahora con más detalle a través de las personas y organismos que las han protagonizado. Es el caso del trabajo realizado -y que en parte continúa- por la Guardia Civil de Córdoba a través de sus 1.200 efectivos en la provincia. El relato que ha hecho a CÓRDOBA Emilio Muñoz, comandante jefe de Operaciones, Policía Judicial e Información de este cuerpo, y encargado de la coordinación de los servicios de la Benemérita durante el estado de alarma en Córdoba, dibuja un panorama de trabajo que ha abarcado muchos más aspectos de lo que se creía. Además de avanzar en la lucha contra la delincuencia (drogas, robo, contrabando) en unas fechas de más tranquilidad en las calles, la Guardia Civil ha desarrollado una importante labor humanitaria y de servicio a la sociedad que ha incluido desde las personas sin hogar, el reparto de material de protección a residencias de mayores, material escolar, traslado de respiradores, control y reparto de medicamentos y comida a personas que estaban solas en sus casas, colaboración con todo tipo de colectivos solidarios... Y, por descontado, actuaciones de vigilancia contra los irresponsables que se han saltado las normas del estado de alarma. Junto al reconocimiento al personal sanitario y de otros servicios que se la han jugado en esta crisis, cabe resaltar la entrega de la Guardia Civil en Córdoba, que ha hecho más fácil a los demás el confinamiento. Emilio Muñoz reconoce que nunca había vivido una situación como esta y recuerda que «todavía no ha acabado». Los 13 rebrotes de la pandemia en Andalucía deberían ser para todos una señal de alerta y una llamada a la responsabilidad.