E l deseado acuerdo definitivo entre el Ayuntamiento de Córdoba y el Ministerio de Defensa para el traspaso de la titularidad sobre Caballerizas Reales y el resto de instalaciones militares que necesita el Consistorio para poder llevar a cabo varios proyectos urbanísticos previstos en la legislatura está fijado para final de mes. Así lo anunciaron esta semana tanto la alcaldesa, Isabel Ambrosio, como el teniente de alcalde de Presidencia, Emilio Aumente, tras la reunión mantenida en Madrid con la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el secretario de Estado de Defensa, Ángel Olivares. Además del edificio de Caballerizas, el más significativo sobre la mesa, la operación incluye la farmacia militar y los pabellones del Marrubial. Tras años de pulsos continuos entre las dos administraciones, en los que intereses políticos llegaron a cruzarse en más de una ocasión, y prórrogas que alargaban el esperado desenlace final, el apretón de manos definitivo no parece que vaya a pasar de este otoño. Ayuntamiento y Defensa tomaron la determinación de que antes de que acabe este mes tendrá lugar otra reunión para hacer realidad esta aspiración de Córdoba, para cerrar los tres asuntos. Caballerizas es una vieja asignatura pendiente, la propiedad municipal de la farmacia militar es necesaria para llevar a cabo el proyecto del mercado de abastos de la ronda del Marrubial, y a esto se une que el gobierno local también necesita parte del espacio de los pabellones militares que están en la ronda para que la Junta de Andalucía pueda llevar a cabo la ampliación de la avenida prevista cuando concluya la construcción del carril bici.

A la vista del anuncio tanto de la alcaldesa como de la ministra de Defensa, parece que por fin se va cerrando el proceso, fundamental para seguir colocando unos cimientos sólidos que de forma definitiva fortalezcan el proyecto que Córdoba está desarrollando con éxito en torno al caballo, un activo turístico ya consolidado y potente motor económico para la ciudad, como vuelve a demostrar con su brillantez habitual la feria Cabalcor que se celebra estos días. El primer pilar de ese proyecto es Caballerizas, una instalación icónica para la difusión del caballo cordobés. La gestión que Córdoba Ecuestre lleva a cabo con Caballerizas como epicentro ha logrado, entre otros méritos, que se haya madurado mucho en la profesionalización del sector como elemento turístico de primera fila. Las exhibiciones que ha protagonizado en Rusia, Italia o Francia reconocen al caballo cordobés como uno de los mejores embajadores internacionales de la marca Córdoba. Ahora hace falta que no se vuelva a tropezar en el puzzle de intereses cainitas que retrasa todos los proyectos en esta ciudad.