Este viernes por la noche se da la bienvenida al verano 2019, y con él la llegada de las tan ansiadas vacaciones. El 98% de los españoles ya tiene una decisión tomada acerca de sus próximas vacaciones y un 54% tiene ya destino decidido, según el Observatorio Nacional de Turismo Emisor que analiza las tendencias en base a una encuesta realizada a más de 1.000 viajeros y 600 agencias de viajes. ¿Y cuál será el destino? La playa sigue siendo el sitio preferido, pero crecen con fuerza -diez puntos porcentuales- los destinos internacionales.

Entre los que no tienen el viaje cerrado, el extranjero gana relieve: un 63% se está planteando como una de las opciones algún destino fuera de España. En 2018, el 36% de los turistas había decidido algún destino internacional, una proporción que asciende al 46% este verano. Además, también se incrementan los viajes "soñados" y disminuyen considerablemente los que aducen la experiencia previa (nueve puntos menos). No obstante, seis de cada diez viajeros esperan que sus vacaciones de verano sean parecidas a la mayoría de veranos, según este informe promovido por un grupo de empresas entre las que se encuentran Iberia, Renfe, Carrefour Viajes o la Asociación Nacional de Agencias de Viaje (UNAV).

El gasto de los turistas españoles se mantiene estable, respecto al año pasado, con una media de 714 euros por persona (en 2018 las estimaciones hablaron de 719 euros). Los viajeros con un presupuesto inferior a los 1.000 euros suponen casi la mitad (49%), mientras que los que superan los 2.000 euros suponen sólo el 8%. Los viajes de playa serán los destinos más frecuentes y los protagonistas en casi todas las edades este verano, como siempre. El segundo lugar lo ocuparían los viajes culturales (26%) y el tercero los de relax (15%).

El retrato tipo de un turista nacional, según Observatur, es un viajero que viaja en familia, durante una media de 8 días y casi siempre en agosto, sino en julio. Se gasta alrededor de 714 euros que paga con sus ahorros, su salario o con la paga extra veraniega es decir, no pide un crédito para el viaje, esto solo lo hacen el 8% de los viajeros encuestados-, además, eligen el hotel como alojamiento preferido, en detrimento de los pisos turísticos, eso sí, lo contratan todo a través de Internet.

EL SEXO Y LA EDAD LO CAMBIA TODO

Sin embargo, dependiendo de algunas pautas como el sexo o la edad, el retrato del turista tipo varía. Así, por ejemplo, las mujeres viajan más en grupo de amigos que los hombres, sobre todo con amigos de la pareja; les gusta más hacer viajes "diferentes" (44%, frente al 38% de los hombres) y se gastan menos dinero: ellos prevén gastar una media de 762 euros por persona, mientras que ellas se quedan en los 665 euros.

En cuanto a la edad, los jóvenes apuestan más por apartamentos turísticos mientras que los mayores son más proclives al hotel; según se eleva la edad de los viajeros aumentan los viajes de relax, mientras que los culturales tienen más público entre los más jóvenes (aunque también para aquellos que tienen entre 55 y 64); los menores de 25 años son más proclives a un veraneo diferente al habitual y cuanto más mayor es el turista, antes hace la reserva de sus vacaciones, los jóvenes son más de dejarlo para el último momento. También el periodo de las vacaciones varía: agosto (el mes elegido por los más jóvenes) adquiere especial importancia entre los 35 y los 54 años, a partir de esta edad hasta situarse incluso por debajo de septiembre entre los mayores de 65 años.