El Tesoro Público prevé elevar la emisión neta desde los 32.500 millones de euros previstos inicialmente para este año hasta los 130.000 millones como consecuencia del aumento de deuda pública derivado del enorme gasto de la crisis del coronavirus y los menores ingresos a causa de la contracción económica. Así lo detalla el organismo en una revisión de su programa para hacer frente a una pandemia que «está teniendo importantes consecuencias económicas» en España.

El mayor gasto público derivado de la pandemia y la caída de los ingresos ha llevado al Tesoro a elevar en unos 97.500 millones de euros la necesidad inicial de financiación neta, multiplicando por cuatro la previsión inicial, de 32.500 millones. La necesidad de financiación neta de 130.000 millones se convierte así en la más alta de la historia del Tesoro, superando incluso la del año 2009, cuando se propuso captar 110.000 millones nuevos. No obstante, según fuentes de este organismo, el Tesoro espera poder obtener parte de esta financiación necesaria de los distintos mecanismos en los que está trabajando la Comisión Europea. Así, de los 130.000 millones de nueva financiación necesaria se podrían llegar a descontar unos 15.000 millones que España podría recibir del sistema de reaseguro de empleo (SURE), así como el importe que se pueda percibir del fondo de reconstrucción de 500.000 millones pactado entre Francia y Alemania, todavía pendiente de aprobación.

En términos brutos, el Tesoro Público estima una necesidad de emisión de deuda en el 2020 de 297.657 millones de euros. Con esta cantidad se debe financiar la nueva necesidad de 130.000 millones de euros y refinanciar los vencimientos de títulos previstos para este año. De la emisión bruta prevista de 297.657 millones, se prevé financiar 185.969 millones a medio y largo plazo mediante bonos y obligaciones y otros 111.688 millones a través de letras del Tesoro.

Desde que estalló la crisis del covid-19, el Tesoro comenzó a acelerar sus emisiones, de manera que ya ha financiado 143.491 millones de euros en el mercado, el 48,6% del nuevo objetivo establecido para el 2020, de los cuales 101.738 millones han sido a medio y largo plazo y 41.753 millones han sido en letras.