En Europa por las reglas del mercado y en España por la importante presión fiscal a la que son sometidas, las telecos Española cargan contra la regulación que las sitúa en desventaja frente al resto de empresas de telecomunicaciones (y digitales) del mundo y hacen peligrar, dicen, el despliegue del 5G en este país. En Europa hay cerca de 450 operadoras mientras que en Estados Unidos y China hay 4 y 3 empresas de telecomunicaciones, respectivamente.

Los líderes de las tres grandes empresas de telecomunicaciones en España Telefónica, Vodafone y Orange- entonaron al unísono uno tras otro la misma queja durante la jornada 'La digitalización en España: retos y oportunidades', organizada este miércoles por el sindicato UGT en el madrileño Círculo de Bellas Artes.

El primero fue el presidente de Telefonica España, Emilio Gayo, quien aseguró que el sector de las telecomunicaciones en Europa es "deflacionario" en alusión a la caída de los ingresos del sector en Europa que cifró en un 30% menos desde el año 2008. En el caso de Telefónica, el presidente de la 'telco' en España, aumentó esa caída en un 39%. Además, según Gayo, la capitalización bursátil de las empresas de telecomunicaciones en Europa se ha reducido en un 43% mientras que en Estados unidos han subido un 71%. Y todo se debe a la enorme fragmentación del mercado.

"Europa está perdiendo el tren y está haciendo que sus 'telcos', que son su motor, no crezcan; si no cambia el modelo de regulación para las empresas de telecomunicaciones difícilmente podremos mejorar", explicó Gayo. No obstante, aseguró que todavía estaban "a tiempo" de cambiar las cosas.

'Voraz' presión fiscal en España

En la misma línea, siguió el consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra, quien señaló que el 5G supone un "esfuerzo enorme" y no está seguro de que lo vaya a poder conseguir con "todo el entorno regulatorio que vivimos en España", sostuvo. "Tenemos que pensar muy bien el impacto de la regulación para promover un entorno favorable a la inversión y no solo a la recaudación", dijo Coimbra que se volvió a quejar de la "voracidad" de impuestos indirectos que paga el sector.

"Vodafone paga 200 millones de euros al año de impuestos, sin incluir el impuesto de sociedades. Es una voracidad fiscal que nos preocupa muchísimo cuando tenemos delante que hacer frente al 5G", concluyó.

Por último, el consejero delegado de Orange en España, Laurent Paillassot, planteó como solución la unión de todos los agentes implicados, el regulador, el Gobierno, las grandes empresas, las pequeñas y los sindicatos para cambiar las cosas. "No solo a nivel de España sino también de Europa. No podemos seguir teniendo un entorno tan fragmentado, si queremos liderar en España depende de la acción colectiva que tengamos todos", agregó.

Y se preguntó por qué una empresa como Whatsapp no tiene las mismas reglas que las operadoras de telecomunicaciones. "Hay muchas cosas que no son las mismas reglas para el mismo servicio y esto tiene que cambiar", concluyó.

Por su parte, el secretario general del sindicato FESMC UGT, Miguel Ángel Cilleros Sánchez, criticó duramente al ente de Competencia nacional (CNMC) por estar "extrangulando" la inversión y el talento en España. "Quien debería regular penaliza a aquellas empresas que invierten y crean empleo de calidad -no como en otros casos que es empleo precario. No puede ser que el regulador que tiene que proteger estos aspectos siga anclado en el pasado, no se puedd regular las tecnologías digitales del siglo XXI con reglas del siglo XX", dijo.