En los últimos diez años se han realizado casi 168 millones de contratos nuevos, de los que algo menos de 15 millones han sido indefinidos, es decir, solo uno de cada diez contratos creados ha sido indefinido. En lo que va de año (finales de junio), la situación no mejora con un 6,29% de contratos indefinidos nuevos, es decir, 659.439 contratos de los que solo la mitad (377.654) fueron a jornada completa, mientras que más de 170.000 fueron a jornada parcial y alrededor de 100.000, fijos discontinuos.

Es decir, solo un 3,44% de los contratos creados en el primer semestre fueron indefinidos a tiempo completo, según un informe elaborado por el sindicato USO. Por contra, el 85% de los contratos realizados este año fue de Obra o servicio o Eventuales por circunstancias de la producción y el 7,14% de interinidad.

«Se crea una perversión del sistema. La contratación temporal no es un mecanismo de acceso al mundo laboral, lo ordinario sería hacerlo en función del puesto de trabajo mediante un contrato indefinido», aseguró el encargado del Gabinete de estudios de USO, José Luis Fernández Santillana.