El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Jaime Ponce, ha afirmado este lunes que la entidad pública española cumplió su mandato a la hora de gestionar la resolución de Banco Popular. "La mañana del jueves, 12 horas después de que el banco fuera declarado en posición de quebrar, pudimos permitir que las sucursales abrieran sin efecto en los depósitos o la estabilidad financiera", ha indicado en Bruselas durante la conferencia anual de la Junta Única de Resolución (JUR). "Desde el punto de vista legal, cumplimos nuestro mandato", ha apostillado.

Ponce ha compartido la opinión del miembro del Comité de la JUR Dominique Laboureix, que previamente había señalado que la entidad comunitaria había tenido "mucha suerte" en la ejecución de la resolución de Popular debido a que había comenzado a buscar un comprador por su cuenta varios meses antes.

En ese sentido, el presidente del FROB ha defendido que la estrategia "más eficaz" para preservar las funciones críticas de una entidad financiera es vender la parte central del negocio de la firma a un competidor en el mercado. También ha opinado que es la "mejor forma" de evitar el contagio sistémico, a pesar de que sea una opción "desafiante" por los tiempos que hay que manejar.

CUESTIÓN DE PRECIO

"Tenemos que monitorizar el apetito del mercado para resolver un banco aunque, al final, siempre hay un precio para comprar uno, la cuestión es cuál es", ha explicado. Asimismo, Ponce ha subrayado que el "acceso permanente" a datos "actualizados" es necesario para implementar un esquema adecuado de resolución, así como para elegir la estrategia "correcta" para resolver las entidades financieras que se declaren en quiebra o en posición de quebrar.

En la misma línea se ha expresado el miembro del Comité de la JUR Antonio Carrascosa, que ha defendido que la falta de datos, así como la opacidad, se presentan como los principales "impedimentos" a la hora de resolver una entidad financiera.