La economía alemana creció entre abril y junio el 0,6% respecto al trimestre anterior, informó hoy la Oficina Federal de Estadística (Destatis) en base a datos provisionales.

Según nuevos cálculos, el producto interior bruto (PIB) creció de forma algo más fuerte en el primer trimestre del año -un 0,7%-, señala el comunicado.

Los principales impulsos para la economía alemana llegaron del interior: tanto el consumo de los hogares como el gasto público aumentaron notablemente.

También las inversiones crecieron respecto al primer trimestre, sobre todo en equipos y en construcción.

Por el contrario, el crecimiento se vio frenado por la evolución en el exterior, debido a que las importaciones en términos reales aumentaron, según cálculos provisionales, con bastante más fuerza que las exportaciones.

En términos interanuales, la economía alemana creció en el segundo trimestre del año un 0,8%, frente al 3,2% en los tres primeros meses de 2017.

No obstante, los efectos estacionales y de calendario tuvieron un considerable impacto en los dos primeros trimestres de 2017, ya que entre enero y marzo hubo tres días laborables más que en el mismo periodo del año pasado, mientras que entre abril y junio fueron tres menos.

Así, corregidos los efectos estaciones y de calendario, el PIB creció en el segundo trimestre un 2,1%, frente al 2,0% en los tres primeros meses del año.

Las cifras definitivas del PIB para el segundo trimestre del año se darán a conocer el próximo día 25.