La liberalización del autoconsumo energético en España que se vota este jueves en el Congreso de los Diputados abre una nueva etapa de desarrollo de las instalaciones domésticas, que por primera vez serán una inversión rentable. El objetivo último de la reforma es contribuir a una bajada de los precios medios de la electricidad en España, que aumentaron el 43% desde el 2016 según el propio real decreto del Gobierno.

La Organización de Consumidores y Usuarios asegura que "el autoconsumo es ya una opción de ahorro", y que un simple panel fotovoltaico es capaz de restar en torno a 100 euros al año a la factura eléctrica de cualquier hogar.

MENOR POTENCIA CONTRATADA

Después de años de mayor proteccionismo del Gobierno de Mariano Rajoy en torno al sector eléctrico, el nuevo marco legal liberaliza y abarata la instalación de sistemas de generación. La energía autoconsumida estará exenta de cargos y peajes, en lo que se ha bautizado como la derogación del impuesto al sol. Será posible reducir la potencia contratada, el pago fijo a las compañías eléctricas, e incluso disponer de instalaciones autosuficientes. Falta concretar los elementos de la regulación que afecten a instalaciones eléctricas que viertan energía a la red. También se abre la puerta al autoconsumo compartido.

CAÍDA DE LOS COSTES

La oferta de paneles fotovoltaicos a nivel mundial, de mejor calidad que hace unos años y en su mayoría de procedencia asiática, ya ofrece a precios bajos soluciones de autoconsumo energético competitivas. Y el nuevo marco legal prevé que ya se pueda instalar más potencia solar incluso que la potencia contratada.

PRESIÓN POLÍTICA PARA EL CAMBIO

Asociaciones de consumidores y las defensoras a las energías renovables recibieron el texto del decreto ley de medidas urgentes para la transición energética con entusiasmo y esta misma semana todavía presionaban a los partidos catalanes ERC y PDECat para que no bloqueen un nuevo marco legal que puede ser el catalizador para el recorte de los precios de la electricidad. El Observatori de les Energies Renovables a Catalunya defiende la reforma al entender que "permitirá un desarrollo óptimo del autoconsumo, tan necesario en Catalunya para el fomento de la energía renovable en beneficio de los consumidores".

RENTABILIDAD

Según cálculos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), con la nueva ley el autoconsumo va a ser rentable ya con un solo panel. El ahorro que calculan es de "entre 80 y 100 euros en la factura eléctrica anual" con un solo panel que produzca 550 kilowatios hora al año. Según cálculos de la OCU, el plazo de amortización de la inversión en una instalación completa para un hogar se ha reducido a menos de 10 años. Una instalación completa en una vivienda unifamiliar orientada al autoconsumo puede costar del orden de los 6.000 euros (una decena de paneles solares, batería y conexión) y permitirá reducir el consumo de la red eléctrica en un 60%. El coste de los componentes asiáticos para cubrir necesidades concretas (agua caliente, por ejemplo) es más bajo y la amortización en teoría mucho más rápida.

MENOS CARGAS IMPOSITIVAS

El nuevo marco legal contiene la suspensión por seis meses del impuesto a la generación eléctrica del 7%, que se aplica en el recibo de la luz, y la exención del impuesto especial de hidrocarburos, conocido como 'céntimo verde', para el gas destinado a producción eléctrica. También eleva en un 15 % el límite de consumo al que se aplicaban los descuentos del bono social en la factura de la luz y el nivel de renta que se exige a las familias monoparentales para ser beneficiario del mismo.

BONO SOCIAL

El bono social térmico es una ayuda directa con cargo a los Presupuestos, a diferencia de los descuentos del bono social que corren a cargo de las comercializadoras. Esa ayuda para gastos de calefacción, agua caliente y cocina se abonará a todos los beneficiarios del bono social eléctrico que la soliciten y su cuantía, que variará en función del grado de vulnerabilidad del beneficiario y la zona climática en que esté su vivienda, será como mínimo de 25 euros. El real decreto ley también prohíbe cortar el suministro por impago a familias donde haya al menos un menor de 16 años o personas con discapacidad o dependencia reconocida, y establece diferentes medidas para proteger a los consumidores, como la prohibición expresa de comercializar la electricidad y el gas "puerta a puerta".

Las ayudas estarán sujetas al límite de disponibilidad presupuestaria fijado cada año en los PGE y los beneficiarios del bono térmico -los consumidores del bono social eléctrico que haya a 31 de diciembre del año anterior al pago- recibirán la ayuda en un pago único anual.