La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas se redujo ligeramente el pasado junio hasta el 6,39%, frente al 6,68% registrado en mayo, lo que supone el menor nivel desde abril del 2011, cuando se situó en 6,36%, según los datos provisionales hechos públicos ayer por el Banco de España.

Los créditos dudosos descendieron hasta los 78.611 millones de euros en el sexto mes del 2018, desde los 81.553 millones de euros correspondientes a mayo.

Esta cifra incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que desde enero del 2014 han dejado de ser considerados dentro de la categoría de entidades de crédito. Sin los cambios, la ratio de morosidad se situaría en el 6,57%. En cualquier caso, la tasa de morosidad se situó 6,61 puntos porcentuales por debajo del máximo histórico marcado en diciembre del 2013, cuando se colocó en el 13,6%.

El crédito total del sector aumentó un 0,84% en un mes, hasta los 1,229 billones de euros, aunque en un año cayó un 2,58%. En el mes de junio, las entidades financieras redujeron hasta 49.322 millones de euros las provisiones, lo que supone una rebaja de 1.703 millones respecto al mes anterior.