El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, defendió ayer que las comunidades autónomas «deberían recuperar» el acceso a financiarse en el mercado dado el actual contexto macroeconómico y financiero «favorable». La mayoría de las comunidades tienen desde hace años vetado este acceso por la desconfianza de los inversores y reciben los recursos del Estado a través del Fondo de Liquidez Autonómica, que está condicionado a un mayor control fiscal. El acceso directo al crédito bancario o al mercado de capitales vía emisiones de deuda, defendió Linde, es de «particular importancia» para garantizar que la «presión del mercado» obligue a las regiones a someterse a la disciplina fiscal.

En unas jornadas conjuntas del Banco de España y el Fondo Monetario Internacional celebradas en Madrid, el gobernador destacó que el «históricamente elevado» nivel de deuda pública del país, en torno al 98% del PIB, supone un riesgo para el crecimiento.

La reducción del endeudamiento español, alertó, tardará «varias décadas» en permitir que se alcance un nivel seguro del 60% del PIB. Por ello, defendió que debe ser una «prioridad» para los gobernantes continuar con el proceso de consolidación fiscal para asegurarse de que España sale del procedimiento europeo de déficit excesivo, al que este año es el único país al que sigue sometido.

El gobernador, así, cree «muy probable» que el déficit baje del 3% este año (el año pasado cerró en el 3,07% y el compromiso con la Comisión Europea es reducirlo al 2,2% en el presente ejercicio). Pero señaló que serán necesarios nuevos ajustes fiscales para cumplir la obligación de recortar el déficit estructural en 0,6 puntos porcentuales entre el 2016 y el 2018. El componente estructural del déficit español, destacó, sigue siendo muy alto: ronda el 3% del PIB, el nivel más alto de la zona euro.

Linde advirtió de que sin nuevas medidas que incrementen los ingresos del sistema de pensiones, este se irá ajustando en los próximos años para ser sostenible a través de una reducción de la cuantía de la pensión media en relación con el salario. «Lo que sigue siendo crucial es que cualquier estrategia de reforma sea transparente, aumente el vínculo entre las contribuciones intertemporales y los beneficios del sistema y esté anclada en un mecanismo de ajuste que garantice su equilibrio financiero», reclamó. El gobernador pidió reformas en el mercado laboral para cambiar la estructura de la negociación colectiva y reducir la segmentación entre fijos y temporales.

DISCREPANCIAS / En el mismo foro, Elke König, del Fondo Único de Resolución, y Yves Mersch, del Banco Central Europeo, defendireon la intervención del Popular, pero discreparon sobre qué autoridad europea debe financiar futuras tomas del control de bancos con problemas cuando no haya un comprador, como sucedió en con el Santander. El alto cargo del BCE exculpó a su institución de que el Popular no recibiese más créditos de emergencia y cayese por falta de liquidez. La responsabilidad de fijar qué activos podían presentarse como garantía de estos préstamos, recordó, era del Banco de España.