El mercado laboral español sigue en proceso de recuperación tras la irrupción de la pandemia y en junio el empleo ha continuado ganando peso. El mes cierra con 68.208 afiliados a la Seguridad Social de media más, hasta un total de 18,62 millones de trabajadores en activo en España. En paralelo a esa creación de ocupación, el empleo que se ha conservado en los ertes va reactivándose y 1,6 millones de trabajadores ya han abandona su expediente. El paro ha vuelto a subir, en 5.107 personas, aunque con una intensidad significativamente menor que en los meses precedentes. El diagnóstico que dejan las cifras publicadas este jueves por el Ministerio de Trabajo y la Seguridad Social muestran que el paciente todavía sufre las secuelas del histórico mazazo que supuso en marzo la llegada de la covid-19 y que todavía tiene por delante recuperar 625.892 empleos que le separan de la fotografía precovid. No obstante, el paciente evoluciona favorablemente.

El calor del verano contribuye a la mejoría del enfermo y la recuperación de sectores como la construcción, el comercio y la hostelería han impulsado la ganancia de esos 68.208 nuevos cotizantes. Una cifra que cualquier otro mes de junio sería discreta, pues es el menor incremento registrado de este mes desde el 2015. La recuperación por sectores está siendo muy diversa, pues si bien la construcción prácticamente ya ha recuperado los niveles de empleo perdidos en los primeros compases de la crisis, al sector servicios le está costando bastante más.

El incremento de afiliación de junio muestra una vuelta a una cierta normalidad, con los vicios que han caracterizado al mercado laboral español en esta: como la temporalidad. La contratación volvió a sufrir una intensa caída el último día del mes, con 216.548 bajas. El fin del curso escolar ha provocado que el sector educativo protagonizara, como es habitual para estas fechas, esas extinciones de contratos. No obstante, en la media del mes volvió a repuntar la contratación, con un incremento del 36,3% hasta 1,1 millones de contratos firmados. La nota positiva es que los contratos indefinidos también crecieron intensamente, el 49,2%, y se firmaron 114.393 contratos.

El empleo se está reactivando más por la desafectación de trabajadores en erte que no por la creación de nuevo empleo. Así lo ha manifestado el secretario de Estado de Seguridad Social, Israel Arroyo, en la rueda de prensa de este jueves. 1,6 millones de trabajadores en expediente, de los 3,4 millones que llegaron a estar afectados, ya se han reincorporado a su centro de trabajo. Los trabajadores de la restauración y hostelería han liderado esa reincorporación y la mitad de los afectados ya se han reincorporado. Quedan todavía 1,8 millones de ocupados en ERTE.

Leve repunte del paro

Junio también dejó un leve repunte del paro, de 5.107 personas, que, a su vez, representa la primera subida del paro en junio desde el 2008. El flujo de nuevos parados durante esta pandemia va a la baja y está experimentando una "notable ralentización", según ha manifestado el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey. El paro subió en junio cinco veces menos de lo que lo hizo en mayo y 60 veces menos de lo que lo hizo en marzo, primer mes del virus.

Que suba la afiliacióN y que también suba el paro son dos fenómenos compatibles en el mercado laboral y ello puede explicarse por varios factores. El paro puede subir directamente porque una persona ha perdido su empleo, aunque también por la movilización de personas que ya estaban en paro y que deciden apuntarse formalmente en las oficinas ante la perspectiva de encontrar empleo. También puede bajar o aumentar en menor medida ante la no renovación del alta por desempleo de gente que ya estuviera desde hace tiempo en paro.

La explicación que ha manifestado el Gobierno en su rueda de prensa este jueves para explicar esa subida es doble. Por un lado, la activación de parados en Valencia, ante una oferta pública de empleo para socorristas de playa que requería de estar dado de alta en el SEPE como demandante de empleo. Por el otro, la finalización del año escolar y la destrucción de empleo entre los trabajadores temporales de la enseñanza. Algo que, no obstante, es una constante cada año y que en otros ejercicios no ha arrastrado al alza la cifra total de parados. La falta de demanda en las actividades relacionadas con el turismo, que por volumen copan la estadística, puede haber influido negativamente en ese sentido.

Pese al incremento medio registrado en el conjunto de España, hubo un total de diez comunidades autónomas en las que el desempleo descendió. Estas fueron Asturias, Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla-León, Extremadura y Galicia.