Si bien el sector que más recurrentemente se cita como de los más perjudicados por el estallido de la crisis es el de la construcción, hay otra rama de actividad que también sufrió con especial intensidad los estragos de la recesión: La industria. Esta fue otra de las ramas que más peso perdió tras el ciclo económico iniciado en el 2008, tal como constata un informe publicado este martes por el Instituto de Estudios Económicos (IEE).

Este estudio refleja que España registró en el 2018 uno de los porcentajes más bajos de empleo en el sector industrial, el 18,2% sobre el total de ocupados, siete puntos menos que en 2008, cuando el peso de la industria en el empleo era del 25,3%. Echando la vista atrás hasta el año 2000, la caída es aún más pronunciada, superior a los once puntos.

El informe del IEE constata que el sector industrial ha ido perdiendo peso en el empleo a lo largo de los últimos años, no sólo en España, sino también en el conjunto de las 28 economías de la Unión Europea (UE). Así, mientras que en el año 2000 la industria europea empleaba al 26% de los ocupados de media, en 2018 esta cifra se ha reducido hasta el 21,8%.

España, con el 18,2% de empleo industrial en el 2018, se sitúa de este modo por debajo del promedio europeo (21,8%) y muy lejos de los países de cabeza: República Checa, Eslovaquia y Polonia, donde un tercio de los ocupados trabaja en la industria.

Por encima de la media europea también figuran Rumanía, Eslovenia, Estonia, Hungría, Croacia, Lituania, Bulgaria, Alemania, Letonia, Portugal, Italia, Finlandia y Austria, con porcentajes que van, aproximadamente, desde el 22% al 30%.

El resto de países de la UE-28 se sitúan por debajo del promedio europeo (21,8%), ocupando los puestos más bajos de la tabla Grecia (14,1%), Países Bajos (14,2%), Reino Unido (16,4%) y Francia (16,5%).