La diferencia entre las exportaciones e importaciones españolas crece pero a menor ritmo. El déficit de la balanza comercial alcanzó los 13.179 millones de euros en los primeros cinco meses del año, una cifra un 8,6% superior a la registrada en el mismo periodo de 2018 cuando se alcanzaron los 12.137 millones, según el Informe de Comercio Exterior publicado por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo. Sin embargo, entonces la diferencia entre lo que sale y entra crecía un 23,5% respecto al mismo periodo del año anterior. En 2017, la situación era peor, con un saldo negativo en la balanza comercial del 58,3%.

Las exportaciones de mercancías se incrementaron un 1,9% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta los 122.470 millones de euros, aunque no lograron alcanzar el crecimiento de las importaciones que se elevaron un 2,5% hasta los 135.649 millones de euros. Para la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, estos datos confirman "el buen comportamiento del sector exterior en los primeros meses del año, que se consolida como un pilar esencial en la recuperación de la economía española y en la modernización del tejido productivo". Sin embargo, se mantiene una la ralentización en el crecimiento de las ventas al exterior pues, el año pasado las exportaciones en los cinco primeros meses se incrementaron en un 2,8%. Las importaciones entonces crecieron un 4,4%.

La tasa de cobertura (porcentaje de importaciones que se pueden pagar con las exportaciones) se situó en el 90,3%, es decir, 0,5 puntos porcentuales menos que la registrada entre enero y mayo de 2018 (90,8%). El saldo no energético (el que no cuenta las compras de energía de las que España es muy dependiente) arrojó un déficit de 2.973,2 millones de euros, frente al déficit de 1.689,2 millones de euros de 2018, mientras que el déficit energético se redujo un 2,3%.

En volumen, las exportaciones subieron un 0,5% interanual, dado que sus precios, aproximados por los índices de valor unitario, crecieron un 1,4%. Las exportaciones de productos no energéticos crecieron un 1,8% (113.855 millones de euros) por debajo que los productos energéticos que se elevaron un 2,8% (8.614 millones de euros). Entre los principales sectores crecieron las exportaciones de bienes de equipo (6,5%), alimentación, bebidas y tabaco (4,3%) y productos químicos (4,2%). Sin embargo, se mantiene en caída el sector del automóvil el tercer sector en ventas al exterior después de bienes de equipo y alimentación- un 5,9% interanual.

Por otra parte, de las compras de España fuera crecieron un 0,4% en volumen con un alza del 2,1% de los precios. Los productos no energéticos se elevaron un 2,9% hasta los 116.828 millones de euros, mientras que los productos energéticos se mantuvieron estables (18.819 millones de euros).

LAS EXPORTACIONES CRECEN POR DEBAJO DE LA UE

En comparación con otros países del entorno, ese crecimiento de las exportaciones españolas del 1,9% fue menos intenso que el crecimiento de la zona euro (4,2%) o de la Unión Europea (4,7%). Entre las principales economías de la Unión Europea crecieron también las exportaciones de Alemania (2,4%), Francia (6,9%), Italia (4,0%) y Reino Unido (4,2%) por encima de las de España.

Las exportaciones dirigidas a la Unión Europea en el periodo representaron el 66,4% del total con un incremento interanual del 1,4% interanual, mientras que las dirigidas a la zona euro crecieron un 1,1% interanual (59%). A los destinos extracomunitarios se dirigieron el 33,6% con un alza del 2,8% interanual.