El crédito al consumo, uno de los principales indicadores del clima y las perspectivas económicas, está ya bordeando los niveles previos a la crisis. Los préstamos nuevos para la compra de vehículos crecieron el 21,2% el año pasado, hasta los 10.193,2 millones de euros, un nivel que no se alcanzaba desde el 2008, último ejercicio de crecimiento económico antes de la Gran Recesión. Y la financiación para el resto de bienes de consumo se incrementó un 10,13%, hasta los 17.161,4 millones, volumen similar al alcanzado en el 2009 pero todavía inferior al del 2008 (21.554 millones).
Este tipo de préstamos constituye uno de los mejores indicadores financieros de la renta disponible y la confianza en el futuro de la economía de los ciudadanos particulares, por encima del crédito para la vivienda (el mayor precio de esta excluye a más colectivos y además hay compradores que adquieren pisos como inversión) y, por su naturaleza, de la financiación a pymes y, sobre todo,empresas. Los ciudadanos de a pie, así, tienden a no comprar o renovar sus bienes de consumo cuando no tienen recursos o cuando preven que sus ingresos disminuyan o surjan otras necesidades más acuciantes.
En este sentido, es aún más relevante que el número de contratos ha subido el 18,3%, hasta alcanzar un nuevo máximo histórico de diez millones de acuerdos. Es decir, que los consumidores financian más compras que nunca, aunque lo hagan por importes menores por comprar productos más baratos o por aportar más recursos propios que en el pasado. Los datos proceden de Asnef, la patronal que reune a los principales establecimientos financieros de crédito: filiales de los bancos tradicionales, entidades especializadas como Cetelem y Cofidis, y financiadoras de las grandes marcas de automóviles y las grandes superficies comerciales, como El Corte Inglés.
CUARTO AÑO
En conjunto, el crédito nuevo al consumo de estas firmas creció el 14,01% el año pasado, a los 27.354,6 millones, en su cuarto año consecutivo de crecimiento, hasta el nivel más alto en siete años. En el 2009 fue de 31.599 millones, pero el nivel actual ya es más alto que el del 2008 (23.470 millones). El presidente de la asociación, Fernando Casero, ha asegurado que los datos demuestran que los ciudadanos tienen "más confianza" en la economía, ya que se ha registrado un "gran año" pese a "incertidumbres importantes" como el 'brexit' y la victoria de Donald Trump en las elecciones estadounidenses.
La crisis, ha asegurado el líder patronal, "está remitiendo" y los hogares se deciden a renovar su equipamiento, en buena medidas gracias a la bajada del desempleo en 2,3 puntos, que ha permitido que los nuevos empleados consuman. Casero, con todo, ha admitido que las cifras preliminares del primer trimestre apuntan a una desaceleración, en línea con la de la economía, pero se ha mostrado confiado en que la "buena marcha" de 2016 "se repetirá" este año, aunque sin comprometerse a asegurar que con crecimientos de la misma dimensión.
