Si no puedes con tu enemigo, únete a él. Cabify ha tomado buena nota de este viejo dicho y empezará a ofrecer el servicio de taxi a sus usuarios en las ciudades de Madrid y Valencia, desde este jueves. El nuevo servicio de taxi se suma a los servicios de vehículos de alquiler con conductor o de motos y patinetes eléctricos que ya ofrecen en Madrid.

En una primera fase de este proyecto, Cabify sumará una flota de 100 taxis en Madrid y en torno a 10 vehículos en Valencia para posteriormente integrar nuevos operadores a su oferta. Pero esperan atraer a más conductores y expandirse tanto en número como en territorio. Así, en Madrid hay un total de 15.000 taxistas por lo que todavía les queda mucho margen, según las cifras de la empresa.

Desde Cabify presumen de las ventajas que supone esta nueva propuesta para los usuarios y para los taxistas. Por un lado, el usuario tendrá la opción de elegir a través de la aplicación entre la oferta de VTC y la de taxis y podrá conocer una estimación del precio final. El precio de la carrera se establecerá vía taxímetro, como corresponde según la legislación española, aunque la intención de la compañía es que cuando la regulación permita su implementación completa, ofrecer también un precio cerrado.

Además, después de cada viaje, el usuario recibe un correo electrónico con el resumen del trayecto y su ticket del servicio correspondiente. Para los taxistas, Cabify asegura que a mayor número de coches, mayor necesidad de los usuarios. Entre las condiciones que les ofrecen están las comisiones que se llevan, son menores que la antigua Mytaxi, rebautizada como Free Now, que se establece en 12,5% de la carrera.

Madrid y Valencia serán las primeras ciudades en las que Cabify ofrezca estos servicios, después de Santander en la que llevaron a cabo una pequeña prueba piloto en el mes de abril con una cooperativa formada por entorno a tres o cuatro taxis. El resultado ha supuesto un crecimiento del 25% en la facturación media de estos taxistas desde que operan con la aplicación de Cabify, según fuentes de la compañía.

La prueba de Santander fue una pequeña toma de contacto de esta tecnología en España, pero Cabify lleva varios años de experiencia en el sector del taxi en Latinoamérica. En concreto, en cerca de 8 países prestando servicios de taxi y VTC. En enero de este año, se integraron a Easy Taxi, la mayor empresa de taxis de Latinoamérica.

"A nivel global, cerca de la mitad de los trayectos que se contraten a través de Cabify los completamos con taxistas. En España también seguimos avanzando en este camino y aunque es un mercado diferente, confiamos en que cada vez se sumen más taxis y otras opciones de movilidad", agregó el director global de Cabify, Vicente Pascual.

La intención de Cabify es ampliar estos servicios a cualquier ciudad de España e incluso abrirse a aquellas ciudades donde no operan con VTC. También en Barcelona tienen intención de llegar con este proyecto, siempre y cuando, la experiencia de Madrid y Valencia sea buena y genere interés tanto en los usuarios como por parte de los propios taxistas.