La Comisión Europea ha decidido multar con 880,5 millones de euros al fabricante de camiones sueco Scania por participar durante 14 años en un cartel que pactaba precios y que repercutía sobre sus clientes los costes de las nuevas tecnologías exigidas para cumplir con las reglas de emisiones. "La decisión marca el punto final a nuestra investigación sobre un cartel que ha durado catorce años y que ha afectado a un número sustancial de transportistas en Europa", ha valorado la comisaria de competencia, Margrethe Vestager.

Los servicios de la competencia comunitarios lanzaron la investigación hace seis años con inspecciones sorpresas. En julio de 2016 la Comisión Europea cerró un acuerdo con los fabricantes MAN, DAF, Daimler, Iveco y Volvo/Renault que Scania, al contrario que los otros cinco participantes del cartel, decidió no aceptar. Bruselas decidió entonces continuar con la investigación.

"Scania y los demás fabricantes producen nueve de cada diez camiones medios y pesados vendidos en Europa. Estos camiones se ocupan de tres cuartos del transporte de bienes en el continente y juegan un papel vital en la economía europea", argumenta Vestager sobre los motivos para castigar a Scania. La infracción, ha explicado Bruselas, se prolongó 14 años, desde enero de 1997 hasta el 2011.

Reuniones secretas

Entre 1997 y 2004 altos responsables de las compañías mantuvieron reuniones secretas, coincidiendo con ferias y otros eventos, y conversaciones telefónicas. A partir de 2004 prosiguieron con intercambios de información vía electrónica. "Durante todos estos años, las discusiones se centraron sobre los mismos temas: el aumento del precio bruto, el calendario para la introducción denuevas tecnologías de emisión y el impacto sobre los clientes del coste de estas tecnologías", acusa Bruselas.

Según la política de la Comisión Europea, la primera empresa en destapar un caso de este tipo recibe inmunidad y las siguientes una reducción en la multa. MAN fue la primera en revelar el cartel por lo que recibió inmunidad. Otras recibieron una reducción en la sanción tras admitir que estaban implicadas en el cartel. "Scania eligió no cooperar y por eso no se beneficiará de ninguna reducción en la multa", ha concluido Vestager.