El Gobierno pretende impulsar los planes de pensiones, con menores comisiones y más facilidades para rescatar lo invertido, como establece el real decreto aprobado el viernes pasado. Pero el historial de estos instrumentos de previsión social revela que resulta más rentable la inversión directa en la bolsa y con deuda pública que a través de estos productos de ahorro a largo plazo, en manos de gestores profesionales.

Según un estudio anual que realiza el profesor del IESE Pablo Fernández, entre el 2002 y el 2017, la rentabilidad media anual del Ibex, la principal referencia bursátil en España, más que duplicó la de los planes de pensiones: 8,19% frente al 3,03%, no muy lejos de la inflación media durante el periodo, el 2,19%. En cuanto al bono del Estado a 15 años, la rentabilidad media durante el mismo periodo fue del 4,61%, también por encima de la de los productos para complementar la pensión pública.

El análisis liderado por el profesor de finanzas del IESE concluye, como sucede en sus anteriores ediciones, que «pocos gestores se merecen las comisiones que cobran». De hecho, cuando alguien entrega su dinero a una de estas entidades espera una rentabilidad superior a la que puede obtener él mismo sin conocimientos especiales. «Y, por ello, está dispuesto a pagar una comisión anual superior al 2% en muchos casos», afirman los autores. Con la reforma, la comisión de gestión baja a un media del 1,25%, frente al 1,50%, mientras que la de depósito se reduce del 0,25% al 0,20%.

DISCRIMINACIÓN FISCAL / Otra de las conclusiones del estudio es que el resultado global que se obtiene «no justifica en absoluto la discriminación fiscal» a favor de los planes y fondos de pensiones. Actualmente, son el producto con mayor atractivo fiscal, con un ahorro en el IRPF que puede llegar a 45 céntimos por cada euro invertido, si bien se trata esencialmente de diferir el pago de impuestos al futuro.

En todo caso, el Estado podría animar a invertir en «algunos» fondos, no en cualquiera de ellos, afirman. En varios casos, los inversores «perdieron la desgravación fiscal que les regaló el Estado para invertir en los mismos en menos de cinco años, vía comisiones e ineficiencias en inversión y gestión».

Otro elemento ilustrativo es que, de los 356 fondos de pensiones con 15 años de historia, solo cuatro superaron la rentabilidad del Ibex; y 47, la de los bonos del Estado a 15 años. Un fondo registró, además, una rentabilidad negativa. Los datos no difieren mucho de los que arrojaron los anteriores estudios. En el del 2016, la rentabilidad media del Ibex y de los bonos del Estado a 15 años fue del 5,24% y el 5,27%, respectivamente, frente al 2,03% de los fondos de pensiones con 15 años. Algo similar pasaba con los resultados de los estudios de los periodos 2000-2015, 1999-2014 y 1998-2013.

El patrimonio de los planes de pensiones del sistema individual, el más extendido, alcanzó el año pasado los 74.377,8 millones de euros, con un alza del 5,52% con respecto al ejercicio anterior, el nivel más alto de su historia, que en España empezó en 1988, según la patronal de gestoras, Inverco. El número de partícipes, 7,63 millones, registró el año pasado un descenso del 2,49%, y se situó al mismo nivel que en el 2005, según la misma fuente.

DE BESTINVER A MPP F-100 / Los dos fondos más rentables durante el periodo -Bestinver Ahorro, de renta variable mixta, y Futurespaña, del grupo Santa Lucía, de renta variable- obtuvieron rentabilidades promedio del 9,68% y del 8,77%, respectivamente. Un euro invertido en diciembre del 2002 en el primero se habría convertido en cuatro euros 15 años después, en diciembre del 2017, y un euro del segundo, en 3,50.

Y hay bastante distancia con respecto a los dos peores: Mpp F-100, de renta fija a corto plazo, de Axa Pensiones, con el -0,11%; y PIP Aegon I, con el 0,09%, durante el mismo periodo. Un euro invertido en el último de la lista se habría transformado en 98 céntimos de euro.

A su vez, los 20 fondos con más patrimonio, que sumaban 19.902 millones, tuvieron una rentabilidad del 2,57% durante los últimos 15 años, mientras que en los 20 con más partícipes fue del 1,8%. En resumen, los fondos con mayor rentabilidad «no son los que tienen mayor patrimonio ni mayor número de partícipes».