El Banco de España considera que el crecimiento de la economía española se está desacelerando algo más rápidamente de lo previsto antes del verano y por eso ha revisado a la baja sus perspectivas para e 2018 y el 2019. Según el organismo que gobierno Pablo Hernández de Cos, el producto interior bruto (PIB) de la economía española crecerá este año el 2,6%, una décima por debajo de lo que la propia institución estimó en junio pasado (el 2,7%). Las previsiones para el 2019 se han rebajado al 2,2%, desde el 2,4% estimado en el mes de junio, mientras que la del 2020 se sitúa en el 2%

"Frente a las proyecciones anteriores, el crecimiento del PIB se revisa a la baja en una, dos y una décimas en 2018, 2019 y 2020, respectivamente, como consecuencia, principalmente, del empeoramiento de las perspectivas acerca de la evolución de los mercados exteriores y, en menor medida, de una senda esperada del precio del petróleo algo más elevada", explica el Banco de España en su informe trimestral sobre la economía española, difundido este martes. Así, según el diagnóstico del organismo, las proyecciones contemplan "una continuación de la actual fase de crecimiento" con un perfil de "moderación".

Para el director general de Economía y Estadística del Banco de España, Oscar Arce, estas revsiones "son de una magnitud relativamente modesta". Se trata "de un empeoramiento, no de un parón", ha dicho Arce después de explicar que el empeoramiento del entorno exterior (por el aumento del proteccionismo y su efecto sobre el comercio) "todavía" se ha trasladado de forma moderada a la economía española.

Menos empleo, más paro, más déficit

En línea con esta rebaja de las perspectivas de crecimiento económico también empeoran las proyecciones sobre el crecimiento del empleo, la reducción de la tasa de paro o la correción del déficit publico.

Así, se mantiene la previsión de creación de empleo del 2,4% para el 2018, pero se rebaja en dos décimas las de los dos años siguientes, hasta el 1,9% y el 1,7% respectivamente. Y la tasa de paro se situará previsiblemente en el 11,9% de la población activa al final del 2020, medio punto por encima de lo que se estimaba en junio pasado (11,4%)

El déficit público, por su parte se situará en el 2,8% del PIB este año, apenas tres décimas menos que en el 2017 (el 3,1%) y seis décimas por encima del compromiso asumido por el Gobierno anterior para este año, del 2,2%. Para el 2019 se prevé un déficit del 2,5% del PIB y para el 2020, del 2,2% del PIB (en ambos casos dos décimas por encima de lo estimado en junio).

PEOR QUE EL GOBIERNO

Las previsiones publicadas este martes por el Banco de España se sitúan por debajo de las difundidas por el Gobierno en julio pasado, que mantuvo las estimaciones de crecimiento del Gobierno anterior, en el 2,7% para el 2018 y el 2,4% para el 2019, en línea con lo que había proyectado el Banco de España en julio.

Las nuevas perspectivas del organismo monetario también empeoran las que aparecen en el último panel de 18 expertos que coordina la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), publicado el pasado 18 de septiembre, donde se revisó una décima a la baja sus previsiones de crecimiento para el 2018 y el 2019 respecto al informe anterior hasta situarlas en el 2,7% y el 2,3% respectivamente.