El Banco de España lleva más de dos años reclamando intensamente a los bancos que mejoren su comportamiento con los clientes. La subgobernadora, Margarita Delgado, lo ha reiterado este viernes con contundencia. "La crisis nos ha recordado, bastante dolorosamente, que la conducta es un factor clave a considerar en cualquier modelo de negocio sostenible. Me gustaría señalar que un cambio de conducta es la única manera de responder al reto que el sector afronta para recuperar su imagen y reputación", ha advertido a las entidades.

En unas jornadas internacionales celebradas en la sede de la institución, Delgado ha recordado que los problemas por prácticas comerciales "cuestionables" han causado a la banca mundial unas pérdidas de más de 200.000 millones de euros desde diciembre del 2014, de los que más de 50.000 millones han afectado a entidades europeas. Además de estas altas cifras, ha destacado que también se producen efectos colaterales por el daño que se produce al sector en su conjunto, más allá de a las entidades individuales afectadas.

La sociedad, ha expuesto la número dos del supervisor español, ha cambiado y es más exigente con el sector financiero, con lo que las entidades "deberían moverse para responder a la nueva realidad social y regulatoria". Pero para que este cambio se real, ha advertido, es necesario el "total compromiso" de los principales directivos y ejecutivos.

Delgado ha reclamado a los miembros de los consejos de administración que incluyan la vigilancia de los riesgos no financieros, como los de conducta, en su actividad habitual de vigilancia, en lugar de "simplemente reaccionar a los asuntos de emergencia si los controles fallan".