Audi pagará por haber manipulado cientos de miles de sus vehículos. La compañía automovilística ha acordado el pago de una multa de 800 millones de euros que le permite cerrar parte de la investigación abierta en el marco del escándalo del dieselgate. «De esta manera, Audi reconoce su responsabilidad por los incumplimientos de las obligaciones de supervisión que se han producido», señala el documento.

El lunes de la semana pasada se dio a conocer que la fiscalía de Múnich estaba investigando a la filial del Grupo Volkswagen por haber «manipulado deliberadamente» los protocolos de pruebas, instalando un dispositivo en sus vehículos diésel V6 y V8 que les permitía engañar los controles medioambientales y así «no cumplir con los requisitos reglamentarios», un veredicto que la empresa ya ha asegurado que acepta y que no recurrirá. Aun así, la fiscalía de Múnich sigue investigando a hasta 20 cargos de Audi.

Esa investigación señalaba a la compañía de Inglostadt como el epicentro de la manipulación del poderoso grupo. Debido a la legislación del país, la multa máxima sería de 5 millones mientras que los 795 millones restantes se devolverán de sus beneficios.