A ver, una pregunta simple: ¿alguien cree que la situación de la economía española y de sus cuentas públicas es la misma hoy que a principios de año? Y otra aún más todavía: ¿alguien cree que nos van a regalar dinero sin ningún compromiso de inversión para usarlo como nos plazca?

A ver, una cosa es defender nuestro papel y posición como la cuarta economía del euro y rechazar los viejos estigmas del norte contra el sur y otra muy distinta exigir los fondos para llevar a cabo un programa de gobierno, que, mira por dónde, es contrario a la economía social de mercado de la Unión.

Hace tres años, Yanis Varoufakis, el conocido ministro de Economía griego, publicó un libro de memorias titulado Adultos en la sala, en referencia a la observación que hizo Cristine Lagarde sobre la delegación griega con la que negociaba el FMI.

Pues eso es lo que necesitamos ahora en las negociaciones en Bruselas y el apoyo sin fisuras a Nadia Calviño, que haya adultos en la sala, por nuestra parte, por supuesto.

Es increíble que haya gente con responsabilidad de gobierno que crea de verdad que nos tienen que dar miles de millones para hacer lo que ellos consideren sin ningún tipo de control. Es increíble, sí.