Un 27% de las empresas industriales españolas están interesadas en solicitar licencias de uso de espectro radioeléctrico para el desarrollo futuro de sus propias redes móviles 5G, según recoge un informe elabora por Capgemini sobre el impacto de la nueva tecnología móvil en las operaciones industriales. Tras unas siglas que aparentan mera evolución de la tecnología móvil 4G, el 5G se empieza a dibujar claramente como herramienta de competitividad estratégica para los próximos años.

Es una de las conclusiones del estudio de Cap Gemini, que concluye que las posibilidades que ofrecerá el 5G son tan atractivas para la operativa de las empresas industriales, que en su hoja de ruta digital valoran tener sus propias redes privadas 5G, frente a opciones como redes convencionales WiFi. Y el porcentaje alcanzado en las encuestas realizadas por la consultora es inverior a la media del 33% obtenida de las realizadas a más de 800 directivos de empresas industriales y 150 directivos del sector de telecomunicaciones de 12 países. No obstante, incide en que el avance de esta cuestión estará muy ligado a la evolución de las regulaciones en los diferentes países.

El informe recoge que el 78% de las empresas de carácter industrial españolas señalan que el 5G y su capacidad de conectividad es el tercer factor más importante de su transformación digital en los próximos cinco años, tras la adopción de la nube (85%) y la automatización avanzada (82%). No andan desencaminados los altor directivos al entender que buena parte de la competitividad futura dependerá de las comunicaciones seguras a alta velocidad entre dispositivos (5G), la gestión de información masiva en la red y la implementación de tecnologías robotizadas de toda índole.

El grueso de compañías mundiales (75%) coloca al 5G como el segundo factor más importante, precedido igualmente de la nube (84%), pero antes que la automatización (73%). En este contexto, el 69% de las empresas españolas de carácter industrial planea utilizar el 5G en su operativa en un plazo de dos años, una vez esté disponible, mientras que, más concretamente, el 21% está dispuesta a implementarla ya en el primer año.

Esta perspectiva, es muy similar a la de Estados Unidos (68%), Noruega (68%) y Francia (67%) y dista bastante de la de Alemania, donde sólo un 49% de las empresas implementaría el 5G a lo largo de un plazo de dos años, mientras que es inferior a la de Reino Unido e Italia, donde el porcentaje asciende al 75%. Si se consideran sólo las previsiones de implementación para el primer año de disponibilidad, Italia, Francia y Canadá lideran la clasificación (35%, 30% y 27%, respectivamente).

En cuanto a los argumentos de negocio por los que apostar por el 5G, contar con operaciones más seguras y mejorar la eficiencia operativa y el ahorro costes son los dos más compartidos por las empresas industriales españolas (58% y 48%, respectivamente). Les siguen la capacidad que dará el 5G de lanzar productos con mayor rapidez (43%), de brindar una mejor experiencia de usuario (34%) y de incrementar la productividad de la fuerza de trabajo (19%).

Las empresas industriales españolas conceden más importancia a las ventajas técnicas del 5G con respecto a la media mundial. En concreto, valoran especialmente que garantiza una mayor calidad de servicio (75%, frente al 67% a nivel mundial); su ultra fiabilidad y baja latencia (73%, frente al 62% mundial) y que refuerzan la seguridad (69%, frente al 65% mundial). Por otra parte, el estudio refleja que, a pesar de la incertidumbre en torno al despliegue del 5G, las empresas industriales están dispuestas a pagar más por mayores y mejores coberturas/servicios 5G y así aprovechar todo su potencial en su operativa de negocio. En el caso de las españolas, son proclives a pagar más, con una disposición superior a la media mundial en todos los casos.

No obstante, si se compara este aspecto con la visión de los operadores de telecomunicaciones, el estudio sugiere que estos están infravalorando esta disposición de las empresas. Por ejemplo, mientras el 74% de las empresas españolas pagaría más por mejor velocidad de banda ancha móvil y capacidad, solo el 61% de los operadores cree que hay verdadero interés por estos servicios mejorados.