La Vuelta a España 2020 se disputará entre el 20 de octubre y el 8 de noviembre, según el nuevo calendario oficial que ha hecho público este martes la Unión Ciclista Internacional (UCI), provocado por la pandemia de coronavirus. Asimismo, el Giro, que inicialmente debía celebrarse este mes de mayo, se afrontará entre el 3 y el 25 de ocubre. Ambas carreras coincidirán seis días, ya que resultaba muy complicado desplazar a la ronda española más allá de la segunda quincena de noviembre por cuestiones de climatología y luz.

El nuevo calendario, según fuentes consultadas por este diario, se ha establecido bajo las directrices de que durante el próximo otoño se habrá retomado la normalidad a un nivel suficiente para que los corredores puedan afrontar dos de las tres principales rondas por etapas y que, por lo tanto, el Tour se habrá podido llevar a cabo en las nuevas fechas, entre el 29 de agosto y el 20 de septiembre. En ciclismo, dadas las características, resulta prácticamente imposible poder realizarse a puerta cerrada, ya que no se desarrolla en un ámbito controlado como puede ser un estadio, un pabellón polideportivo o un circuito, y discurre por muchas carreteras pasando por pueblos y ciudades.

De Irún a Madrid

La Vuelta, tal como ya se adelantó la semana pasada, recorta el recorrido en tres etapas -ahora habrá 18 en lugar de 21- ya que no saldrá de Utrecht, en los Países Bajos, tal como estaba estipulado en el trazado original de agosto. La prueba comenzará en Irún, el martes 20 de octubre, ya con una primera llegada en alto al Santuario de Arrate, en Guipúzcoa. Finalizará en Madrid y mantiene todo el dibujo establecido en las fechas iniciales de agosto y septiembre, con los corredores ubicados en el norte de España y dos pasos fronterizos para terminar en el Tourmalet francés y en la ciudad portuguesa de Oporto.

También se han reubicado las clásicas canceladas en abril, que ahora se celebrarán principalmente, coincidiendo con el Giro. En cuanto a pequeñas rondas, la temporada se reinicia a principios de agosto con la disputa del Tour de Polonia (del 5 al 9) , para continuar con un Critérium del Dauphiné recortado en días (entre el 12 y 16), antes de que el gran pelotón se adentre en las entrañas del Tour. La Volta, en cambio, se ha cancelado definitivamente en este 2020, y la 100 edición no se realizará hasta marzo del 2021, siempre y cuando, antes y después, esté controlada la pandemia del Covid-19.

Desde la Toscana

Bajo este aspecto y siempre que las autoridades sanitarias de los respectivos países lo permitan la UCI vislumbra un final de verano y otoño con bicis por media Europa. El ciclismo empezaría a rodar el 1 de agosto en la Toscana, con la puesta en marcha de la Strade Bianche y sus famosos tramos de tierra blanca o 'sterrato'. A continuación, 8 de agosto, llegará la Milán-San Remo. El 23 de agosto está reservado para los diferentes campeonatos nacionales para mantener la costumbre de correrlos el fin de semana anterior al inicio del Tour.

El 'super domingo'

Para las siguientes clásicas que se han salvado de las cancelaciones definitivas habrá ya que esperar hasta septiembre y octubre con la Flecha Valona (30 de septiembre), Lieja-Bastoña-Lieja (4 de octubre), Amstel Gold Race (10 de octubre), Tour de Flandes (18 de ocubre), París-Roubaix (25 de octubre) y Giro de Lombardía (31 de octubre). 'El Infierno del Norte' y la 'Clásica de las hojas muertas' serán por tanto las únicas grandes pruebas de un día que coincidirán con la Vuelta, puesto que el grueso de las carreras restantes se harán en las fechas asignadas al Giro. El Mundial, que este año se realiza en Suiza, mantiene las fechas iniciales, entre el 23 y el 27 de septiembre.

Pero, sobre todo, llama la atención el 'super domingo' del 25 de octubre, fecha en la que coincidirán tres puntos calientes: la finalización del Giro, la gran etapa de la Vuelta que acaba en la cima del Tourmalet y la disputa de la París-Roubaix. No habrán ojos para tanta carrera en tan poco espacio de tiempo.