“Conozco la historia, me suena. Ya ha sucedido otras veces. Se nos critica, se deja de confiar en nosotros y, luego, vamos nosotros y le damos la vuelta a la tortilla. Que no nos den por muertos porque, luego, nos levantamos”. Lucas Vázquez, que falló el 1-3 en Vila-real (2-2) por no regarlárselo a Benzema, asegura que los siete puntos que le saca el líder, perdón, el Barça, en la jornada 17 (por cierto, los mismos siete que le sacaba en la 10ª, tras el 5-1 del Camp Nou que le costó el puesto a Julen Lopetegui), son perfectamente recuperables “pues queda mucha, mucha Liga”. Por cierto, tras aquel pletórico 5-1, sin el concurso de Leo Messi, Ernesto Valverde, técnico del Barça, dijo que "sería una barbaridad dar por liquidado al Real Madrid". Hoy, seguro, sigue pensando lo mismo.

De las últimas 10 Ligas, el Real Madrid se desenganchó, en Navidad y/o Reyes, en ocho de ellas. Cierto, si algún equipo ha demostrado que se levanta de su tumba y gana (no sé si la Liga, pero sí la Champions), es el Real Madrid, pero, tal vez, no el Real Madrid de este año, al que le plantó Zinedine Zidane, su entrenador, y no movió ficha; al que despreció su máxima estrella y goleador, Cristiano Ronaldo, y no movió ficha.

No contrató sustituto alguno para paliar los 50 goles por temporada que viajaban a Italia y sus responsables, especialmente, su presidente Florentino Pérez, aseguraron que el puntal de ese equipo sería Bale, que anoche volvió a lesionarse y van…sí, muchísimas lesiones, cortas, largas y, como explicó Fernando Morientes en la COPE, “me temo que Bale tiene la lesión en su cabeza, cosa que les ocurre a muchos futbolistas, temerosos de lesionar o que, incluso, piensan que están lesionados, cuando no lo están”.

El Madrid, horrible fuera de casa

El conjunto blanco, que volvió a fallar en el primer partido del año, como tantas otras veces, se encuentra, en efecto, a siete puntos del Barça, el líder; ha perdido 21 de los 51 puntos disputados; peor aún, lejos del Bernabéu, ha perdido 16 de los 27 puntos jugados y, más malo todavía, es, después del Huesca, el equipo que más goles ha encajado fuera: 18 por 23 del conjunto aragonés.

La sensación que existe en Madrid es que el conjunto blanco ha vuelto a despedirse de la Liga en invierno, en diciembre, en enero. Y, de nuevo, como ha ocurrido tantas otras veces, ya no depende de él mismo, sino de que pinchen tres conjuntos que se han mostrado, los tres, mucho más sólidos y regulares que él: Barça, Atlético y Sevilla. A la huída porque se temían lo peor (ahora empieza a confirmarse todo) de ‘Zizou’ y CR7, se une, según todos los gurús de la capital, el error del ‘ser superior’ de no querer fichar un delantero goleador de verdad y confiar en Benzema y/o Bale, cuya fragilidad física (y mental en cuanto a temer lesiones o creer que está lesionado sin estarlo) le impide ser el jugador franquicia, referencia. Y a todo ello se une que, probablemente, estamos ya ante el declive de tres bastiones blancos, Modric (33 años), Kroos (29) y Marcelo (30), que, probablemente, ya hayan jugado sus 100 mejores partidos.

Courtois se lamenta ante la resignación de Kroos y Sergio Ramos. / AP / ALBERTO SAIZ

A todo ello hay que añadir que la apuesta de Florentino Pérez, que parece estar pensando más en la nueva ‘catedral’ del Bernabéu y en el fichaje de Neymar y/o Mbappé para la próxima temporada, ha salido rana. Solo Llorente, que ahora se ha lesionado cuatro semanas dando opción a que Casemiro recupere la titularidad sin problemas, ha brillado en la lista de jóvenes formada por Odriozola, Reguilón, Valverde, Ceballos, Mariano, Vinicius y, fundamentalmente, Isco y Asensio, las dos grandes decepciones a la hora de apretar a los acomodados titulares blancos.

El pequeño Cazorla

El Real Madrid empató en Vila-real del mismo modo que pudo haber perdido en campo del Huesca o del Rayo, donde, también en los últimos minutos, le salvó un enorme Courtois y dos balones, uno en cada campo, que sacó Carvajal de la misma línea de gol. “Es evidente que en nuestra Liga es muy difícil, mucho, sumar de tres en tres, es decir, ganar dos, tres o cuatro partidos seguidos”, comentó anoche Carvajal, “porque los rivales, no solo son muy duros y están muy bien entrenados, sino que, además, nos estudian muy bien. Hemos de ser fuertes interiormente, en el vestuario porque, a partir de ahora, cada partido será una final para nosotros, empezando por el del domingo, en nuestro campo, ante la Real Sociedad”, comentó el lateral derecho blanco.

Es evidente que en Madrid ha sentado fatal que el héroe, la estrella, del partido de anoche en el estadio de la Cerámica fuese un recuperado y pletórico Cazorla, que abrió el marcador con un disparo cruzado y lo cerró con un cabezazo impecable desde su 1,65 metros de estatura frente a los casi (1,99) dos metros de Courtois, algo inconcebible para todo un campeón de Europa.