Ernesto Valverde no se fía del Getafe. En realidad, no se fía del Barça. Del barcelonismo, para ser concreto, y de la corriente de "euforia" que ha detectado tras la clasificación para la final de Copa que, como cada año, tiene fecha (que puede variar) y no tiene sede. El entrenador del Barça observa que "el foco de atención" que se centró en la cita de Mestalla, todavía no está colocado sobre el regreso a la Liga contra el Getafe este domingo (16.15 h.).

Y Valverde ha querido alertar de esos peligros: de las consecuencias del triunfalismo y de la peligrosidad del rival, del que todavía se acuerda por las dificultades que generó en la primera vuelta. "El partido de Getafe nos impulsó mucho, fue el primero en el que tuvimos un marcador adverso que remontar". Fue el día, también, en el que se lesionó Ousmane Dembélé en el primer tiempo, que le alejó tres meses y medio del terreno de juego, y en el que Paulinho y Denis levantaron el resultado. Paulinho ha continuado siendo talismán y Denis ha desaparecido.

Aquel Barça se estaba rehaciendo y progresando, con un 4-3-3 y el actual es líder sólido en la Liga y juega con un 4-4-2, está clasificado para la final de Copa y aguarda con impaciencia el retorno a la Champions frente al Chelsea. Pero Valverde no quiere oír hablar de tripletes.

"Está bien que la gente tenga ilusión, pero esto es una secuencia matemática: cuando no tienes ningún título, quieres el primero; si tienes el primero quieres el segundo. Ahora tenemos cero", reflexionó Valverde que situó la conquista del primero en "la victoria sobre el Getafe" como una forma de regenerar la imprescindible motivación en cada encuentro. No hablaba tanto por sus hombres, que también, sino por la hinchada. Al once azulgrana le sobran puntos de ventaja al frente de la tabla.

Petición de ayuda

El técnico hizo un llamamiento a los culés pidiéndoles "ayuda". Para empezar, volviendo al campo, que sufre una crisis de asistencia reconocida por todos los estamentos del club. El descenso de espectadores se cifra alrededor de 13.000 menos por partido. El Getafe, además, es de los menos taquilleros.

"Sería importante que viniera nuestra gente porque ya estamos en la segunda vuelta, se va a empezar a decidir todo y los partidos comienzan a ser cruciales", abundaba Valverde, antes de resaltar las virtudes del Getafe, un rival "muy incómodo y que nunca te deja en paz".