Sandoval definió ayer como “difícil” al rival que le toca torear esta noche a su Córdoba. A pesar de que el Tenerife despidió a inicios de esta semana a Etxeberría y puso a José Luis Oltra al mando de su banquillo, se trata de un equipo construido en verano para aspirar a meterse en la promoción de ascenso.

El conjunto canario dispone de caudal ofensivo y armas en ataque para hacer daño a muchos rivales de Segunda.

Su estilo con Etxeberría era combinativo pero con la presión alta y la intensidad como máximas a esgrimir. Oltra aseguró ayer en rueda de prensa que hará retoques en esa filosofía de juego, pero siempre con la mente en sacar los tres puntos. Ni Córdoba ni Tenerife han ganado en los cinco primeros partidos de Liga. En el caso de los tinerfeños ello se ha debido más a fallos en la definición que a errores groseros atrás.

Aunque solo lleva un punto más, el rival de esta noche solo ha encajado seis goles, anotando cuatro dianas. El Tenerife empezó la temporada con dos empates ante dos equipos que en teoría pelearán por no descender, el Nàstic y el Almería. Aunque ambos partidos los jugaron los canarios como visitantes. En su primer duelo en casa empataron contra el Deportivo de la Coruña y acto seguido cayeron frente al Málaga en La Rosaleda. La derrota cosechada en su estadio ante el Reus puso punto y final a la etapa de Etxeberría en el Tenerife. Con Oltra aspiran a mantener el buen trato del balón, a robar en campo contrario y, eso sí, a tener las líneas más juntas para evitar las contras rivales. Un estilo de juego que chocará con el planteamiento del Córdoba de Sandoval y que deparará esta noche, a buen seguro, un bonito espectáculo.