Sudáfrica no ha dado opción, ni una, a Inglaterra, a la que ha dominado de principio a fin en el partido más esperado del Mundial de Rugby, la gran final que se ha celebrado este sábado en la ciudad japonesa de Yokohama. Los 'Springboks' se han llevado el título tras destrozar a los jugadores ingleses con un resultado incontestable; triunfo por 32-12.

El dominio sudafricano ha sido aplastante. Una Inglaterra sin ideas y que nunca ha tenido capacidad de reacción ha caído vencida por el poderío físico de los sudafricanos que inicialmente no eran los grandes favoritos para proclamarse campeones del mundo.

En unos minutos la crónica de la gran final.