Si las aguas bajan turbulentas por el Guadalquivir a su paso por Córdoba, no andan menos revueltas en el Ebro. El Real Zaragoza está firmando una temporada hasta ahora más que discreta y afronta el partido del domingo ante los blanquiverdes como una verdadera final adelantada. El equipo de Lucas Alcaraz sigue sin levantar cabeza y suma dos derrotas y un empate en sus tres últimos partidos ligueros. De hecho, de las tres victorias mañas esta temporada, dos han sido fuera de casa y la única lograda en La Romareda fue en la jornada inaugural de Segunda, allá por el 19 de agosto.

A la falta de eficacia de cara a portería por parte del Zaragoza se une su fragilidad defensiva, con hasta ocho partidos en los que ha encajado dos o más goles de los 16 disputados. De hecho, en el Zaragoza andan a la casa de un defensa que ayude a mejorar las prestaciones en la retaguardia, dado que ninguno de los cuatro centrales probados hasta ahora -Grippo, Verdasca, Perone y Álex Muñoz- ha conseguido hacerse con el puesto de titular sin discusión. La lesión de larga duración del suizo, que estará fuera durante seis o siete meses, habilita al club aragonés a cubrir su plaza con el fichaje de un jugador con contrato en vigor en un equipo de Primera o de Segunda División o en el paro, siendo el principal objetivo Alberto Guitián, del Real Valladolid.

De este modo el equipo blanquiverde visitará La Romareda en un momento de gran tensión en el equipo maño, con problemas extradeportivos como el protagonizado por Pombo, que criticó a algunos compañeros delante de aficionados con los que fue a hablar tras un encuentro del equipo maño. La afición zaragocista está bastante enfada con el rendimiento de su equipo y este es un factor que pesará en el devenir del choque. Y es que si el Córdoba anda en una situación delicada, con solo 12 puntos y en el vigesimoprimer puesto, el Zaragoza marcha decimonoveno, con 15 puntos y también en descenso. Un partido, por tanto, en el que no habrá margen para el error.

Mientras tanto, el entrenador zaragocista, Lucas Alcaraz, recupera para la causa a Marc Gual y Diego Aguirre, que volvieron ayer a los entrenamientos. Eguaras sigue siendo seria duda.