Pues nadie es adivino y no puede saber cuántos puntos volarán del Municipal de Villarrubia en su estreno en la tercera categoría del fútbol español. Se vino hablando durante toda la semana de la estrechez del campo, de la hierba artificial, de la modestia del adversario. Bueno, no. De eso no se habló públicamente, pero más de uno miraba al de al lado durante los últimos días, incluso en la previa del encuentro, y daba la sensación de que el Córdoba CF debía imponer su supuesta superioridad por decreto. Y generalmente, sobre todo en estos campos que parecen pin-balls, lo de las categorías, el nivel, la calidad y esas zarandajas quedan en un segundo plano.

Habría que recordar campos como el Santo Domingo de Alcorcón cuando los alfareros llegaron a la plata. O el del tristemente desaparecido Reus. Allí el balón solo se rasea, aparentemente, en los pocos segundos que le interesan al dueño del terreno de juego. Y eso es lo que hizo el Villarrubia de los Ojos ayer, aprovecharse de que el Córdoba CF no supo imponer esa supuesta superioridad técnica. Cierto que a este Córdoba CF le falta ese nueve poste que sepa recibir de espaldas y dar oportunidad a construir el juego de ataque. Cuánto lo echó de menos ayer el conjunto blanquiverde. Pero no es menos cierto que tanto por sistema como por jugadores que ya están en el plantel, al equipo de Enrique Martín se le echaron en falta algunas cosas. Por momentos, demasiadas. En lo otro, en lo que exigía el tipo de campo, el Córdoba CF no anduvo mal, aunque de manera irregular. Compitió en líneas generales bien, pero con lagunas temporales que llevaron a temer seriamente por el marcador. De hecho, el equipo de Javi Sánchez no anotó gracias a los palos (dos en la portería blanquiverde), a Isaac Becerra y a que al menos dos de los centrales (sobre todo Fidel) anduvieron más que concentrados, contundentes y sin buscarse excesivas complicaciones.

Y eso que no empezó mal el conjunto blanquiverde. Los primeros diez o 15 minutos fueron más suyos que del rival, con alguna llegada, algún disparo desde la frontal y transmitiendo la sensación de que era más que el adversario. Sin embargo, los del Guadiana se quitaron el complejo de la excesiva modestia paulatinamente, poco a poco, como una gota malaya. Los manchegos fueron a más progresivamente y al Córdoba CF le costaba contener tanto balón arriba, tanto rechace, tanta posesión dividida y, de repente, tanta llegada por banda con patada a seguir. Arroyo estrelló el balón en el poste tras un saque de banda, una asignatura que quedó en blanco sorprendentemente después de una semana de entrenos estrechando campos y, se suponía, practicando la estrategia defensiva a balón parado. Sufrió el Córdoba CF en la estrategia, más de lo previsible, y eso, combinado con la pérdida paulatina de los balones divididos, hizo que en el último tercio de esa primera parte transmitiera la sensación de que el adversario le iba ganando la partida paulatinamente.

Se confirmó esa sensación en el arranque del segundo acto, cuando Dieguito, a los 51 minutos, volvió a toparse con la madera tras un disparo cruzado que pareció tocar algún jugador de la defensa cordobesista.

Copete volvía a aparecer en los minutos 54 y 58 y lo mejor que se podía decir del equipo de Enrique Martín es que, olvidado el fútbol, la categoría, la supuesta calidad y todas las demás zarandajas, al menos competía todo lo que podía. Sí, transmitía que en ese valor, con respecto al adversario, iba más que al límite, pero parecía sumarle. Porque durante un cuarto de hora, hasta el minuto 75, no se supo nada de los manchegos. Enrique Martín dio entrada a Owusu por Javi Flores y el ghanés intentó suplantar la figura de ese nueve de referencia. En una ocasión lo logró imitar y, de cara a la portería de Isaac Becerra, le dio una eléctrica asistencia a Juanto Ortuño, que corrió con el balón, se introdujo en el área, se plantó ante Samuel y se estrelló en el maliense. Fue la ocasión más clara, quizás, de los blanquiverdes, que tuvieron unos minutos en los que parecía que podían llevarse los tres puntos. Dieguito había reaparecido un minuto antes de esa gran ocasión de Ortuño, pero el Córdoba insistió con un balón de José Antonio González, que intentó colocarla a la escuadra desde dentro del área pero sin encontrar el objetivo, y con otra oportunidad, desde el punto de penalti, a cargo de Antonio Moyano (min. 78), que había entrado dos minutos antes al terreno de juego.

Fue el canto del cisne blanquiverde. El Córdoba CF parecía desfallecer en los últimos minutos y daba por bueno el punto después de lo ocurrido. Ante esa última contemporización de los visitantes, el Villarrubia lo intentó con un par de llegadas, no excesivamente claras, pero que hizo que los ánimos en el millar de aficionados que se dieron cita siguieran calientes.

Un punto en un campo de un recién ascendido y visto lo visto sobre el terreno de juego parece poca renta para un candidato al ascenso. Aunque también es cierto que a este Córdoba CF le hacen falta, al menos, tres titulares más, incluido ese nueve de referencia. Pero también le hace falta mucho más trabajo en la medular, muchas más ganas de hacer cosas con el balón y, sobre todo, ideas de qué hacer con él. Porque en campos como el de Villarrubia la renuncia a esa calidad equilibra la competitividad. Por lo que habrá que avisar a todos, no solo a los de fuera, también a alguno de dentro que sí, que esta es la Segunda B. Y todos tendremos que tomar nota.

- Ficha técnica:

0 - Villarrubia: Samuel, 6, Carlos García, 5, Andriu, 5, Ricardo Carvalho, 5, Carlos Martínez, 5, Toni Seoane, 5, Arroyo, 5, Julio de Dios, 5, Copete, 6, Dieguito, 6, Fran Cortés, 6

Cambios: Arribas por Fran Cortés (min. 69), Grillo por Copete (min. 88) y Fran Minaya por Dieguito (min. 91).

0 - Córdoba CF: Isaac Becerra, 6, Fernández, 4, Chus Herrero, 4, Fidel Escobar, 6, Ángel Moreno, 5, Jesús Álvaro, 5, Imanol, 5, José Antonio González, 4, Javi Flores, 5, De las Cuevas, 4, Ortuño, 5

Cambios: Owusu por Javi Flores (min. 60), Antonio Moyano por De las Cuevas (min. 76) y Zelu por Ortuño (min. 88).

Árbitro: Campos Salinas (murciano), amarillas a Toni Seoane (min. 24) por parte del Villarrubia y a José Antonio González (min. 29), Fernández (min. 68), Fidel Escobar (min. 86) y Owusu (min. 88) por parte del Córdoba.

Campo: Nuevo Campo Municipal de Villarrubia de los Ojos.

Espectadores: Unos 1.200 espectadores, de los que 250, aproximadamente, eran cordobesistas.