El Córdoba ha tenido en la mañana de este sábado su primera sesión de entrenamiento del día. La dinámica durante las primeras semanas de la pretemporada será la de hacer dobles sesiones mañana-tarde. Con bastante menos aforo que ayer (unas 40 personas) los cordobesistas desplazados hasta la Ciudad Deportiva pudieron disfrutar de algunos detalles interesantes.

En primer lugar destacó la presencia de Soler, ya que con la lesión de Cisma el Córdoba solo dispone de tres centrales (João Afonso, Josema y Caro). Porque la principal ausencia fue la de otro central que tiene pie y medio fuera, Bijimine.

Tras los rutinarios ejercicios de toque y posesión el técnico blanquiverde, Luis Miguel Carrión, dividió a sus hombres en dos grupos. El primero, en una punta del terreno de juego, se dedicaba a realizar abdominales, flexiones y otros ejercicios musculares acabando con disparo a mini-porterías. El segundo grupo se dedicaba a trabajar la basculación defensiva y el ataque por las bandas, turnándose ambos grupos cada 20 minutos.

De la parte táctico-técnica del entreno se pueden extraer algunas cuestiones importantes. La primera de ellas es la confirmación de la importancia de Javi Lara para la creación de juego. Por el montoreño pasaba todo el juego ofensivo y era el encargado de los cambios de orientación y la búsqueda de los extremos. En las bandas destacaron los únicos atacantes de banda puros del Córdoba, Javi Galán y Jaime Romero. El ex de Osasuna se enfrentó a Víctor Mena, para el que fue un auténtico incordio. Romero gusta de partir desde la derecha para meterse hacia dentro y buscar el disparo con su pierna buena, la izquierda. En varias ocasiones logró deshacerse del canterano y chutar, logrando marcar un gol.

Otro detalle interesante fue la pareja de centrales que probó como titular, João Afonso y Josema. Ambos estuvieron bien despejando los balones aéreos y en general demostraron un nivel de implicación alto.