JOSÉ RAMÓN SANDOVAL / EN EL FILO DE LA NAVAJA

Error en la alineación inicial, acierto en todos los cambios

Parecía a priori excesivo el doble pivote defensivo ante el Deportivo. Y se confirmó. A pesar de sumar cuatro ocasiones (dos claras) en 15 minutos de la primera parte, el equipo no tuvo fútbol y tuvo el balón que le dio el Deportivo. En la segunda parte rectificó y, tanto la entrada de Blati Touré y Álvaro Aguado, como la final de Andrés Martín enmendaron a un equipo que creció por méritos propios y permiso ajeno. Posiblemente, en ese doble pivote en el inicio tuviera mucho que ver la situación del propio Sandoval: en el filo de la navaja. Tiene aún mucho trabajo por delante.

ANDRÉS MARTÍN / DESCARO

Un gol salvador actuando en una de sus posiciones

El chaval tiene descaro, verticalidad y genera problemas a los rivales. Pero aún es joven y hay que ir con cuidado con él. Mientras tanto, su protagonismo en próximas fechas (más que probable teniendo en cuenta los movimientos anteriores de su entrenador) debería ser siempre en la posición en la que jugó ayer, como segundo delantero o, en todo caso, cayendo a banda. Además hay que remarcar que el remate del sevillano que supuso el gol fue el único prácticamente que se produjo en todo el encuentro proveniente de «jugada» y no a balón parado.

DEPORTIVO / DETERMINANTE

Dos expulsiones y una lesión que castigaron su conformismo

El Deportivo de la Coruña terminó el encuentro con nueve jugadores y, además, tuvo que retirar antes de tiempo a Krohn-Dehli por lesión. Tres contratiempos que castigaron cierta autosuficiencia o conformismo de los gallegos al tener el marcador en franquía desde el minuto dos. Pudieron rematar al Córdoba en tres ocasiones y siempre estuvieron a merced de la aparición de algún contratiempo. Por falta de uno, le sorprendieron tres. Si los blanquiverdes hubieran tenido las ideas más claras en la recta final, posiblemente no se habrían llevado ni un punto.