Arcos y Salerm Cosmetics Puente Genil firmaron tablas en un encuentro en el que hubo hasta tres fases perfectamente definidas. Una primera parte primorosa a cargo de los de Pepe Bermúdez, que debieron irse al vestuario con una ventaja cómoda en el marcador merced a su gran juego y a las numerosas y grandes ocasiones de lograr un marcador holgado. Una segunda favorable al conjunto pontanés que abarca desde la reanudación del juego hasta la consecución del empate a dos a cargo de Caballero, en la que los visitantes dominaron a placer y crearon situaciones de verdadero peligro ante el portal de Iván López, estando a punto de conseguir el 1-3 en un cabezazo del ‘gigante’ Alejo que repelió el larguero con el meta del Arcos totalmente superado. Y un tercer tramo que va desde el empate a dos hasta la conclusión del encuentro en el que cualquiera de los dos equipos pudo llevarse el triunfo a sus dominios si no lo hubieran impedido ambos guardametas en acciones inverosímiles que evitaron que la balanza se inclinara hacia uno de los bandos.

El Arcos salió al campo tocado por una varita mágica que provocó que los serranos pusieran en práctica su mejor fútbol en lo que se lleva de liga. Bajo la batuta de Bugatto como director de orquesta y Caballero de primer solista, los blancos hacían circular el balón de una banda a otra apoyándose en perfectas triangulaciones que desbordaban el entramado centrocampista rojinegro. A los dos minutos ya se le anulaba un gol al defensa Benítez y a los cuatro los cordobeses perdían a Ito, uno de sus delanteros más peligrosos, por un tirón en el gemelo. El reajuste de líneas en los de Juanmi Puentenueva dando entrada a Alberto Castro permitió al Arcos demostrar el lugar que ocupa en la tabla desplegando un fútbol de alta escuela que superaba a un Puente Genil que no encontraba la manera de frenar a los arcenses.

Cuenca en el 9 de partido pudo marcar de cabeza a pase de Caballero; un minuto después era Sergio Jiménez el que buscaba el poste saliendo el balón fuera por centímetros; en el minuto 19 era Legupín el que cabeceaba fuera por muy poco a centro de Caballero en otro ataque en el que la corpulenta pero remolona defensa del Puente Genil se veía superada con claridad. El Arcos no concretaba en el marcador el brillante fútbol que desplegaba en el campo y el que perdona ya se sabe.

A los 21 minutos, Pato centraba al segundo palo y Alberto Castro no llegaba al remate, pero los cordobeses empezaban a estirazarse. Respondieron los locales en un tiro cruzado de Caballero que se marchó fuera. En el 26´ contestaba Toni con un tiro de volea a pase de Isco que buscaba la meta de Iván, y en el 31´ Pato empujaba con el cuerpo el balón al fondo de la red arcense a centro de Cano, que entró varias veces por la banda izquierda libre de marca hasta dar el centro de gol preciso. El partido era un espectáculo. El Arcos continuó atacando y otra internada de Caballero a banda cambiada en el minuto 40 habilitaba a Álvaro Ramírez para empujarla de cerca y poner el empate antes del descanso.

La segunda mitad se inició con un disparo de Caballero a banda cambiada que buscaba la escuadra derecha del portal de Christian, respondiendo este en la mejor parada de la mañana, pero el dominio correspondía ya al Puente Genil y en el 61´ Pato casi aprovecha una falta de entendimiento de la zaga arcense para poner el 1-2. Era el preludio del segundo tanto visitante, que pudo subir al marcador en un tiro de Toni que rechazó como pudo Iván, pero que sí materializó Alberto Castro en el minuto 65 recogiendo un balón rechazado en corto por la defensa local para perforar la meta del Arcos y poner el 1-2.

La amenaza pontanesa se hacía realidad y tanto Alberto Castro dos minutos después, como Alejo, cabeceando al larguero en el 73´, pudieron finiquitar el choque. Sin embargo, con más pundonor que juego, el Arcos se agarró a Caballero para establecer la igualada de fuerte chutazo desde fuera del área y poner freno al dominio visitante. De ahí hasta el final, la ocasión más clara la tuvo Alberto Castro -quién si no- en el 87´ en un derechazo que desvió a córner Iván evitando la derrota, aunque los locales, por medio de José Antonio y de Ocaña, llegaron hasta la línea de fondo y metieron pases de gol que no fueron aprovechados por sus compañeros.