El FC Barcelona ha dado un paso más en su lucha contra la falsificación y reventa de entradas. El portavoz del club, Josep Vives, ha anunciado que el Barça presentará una querella criminal contra las redes de fraude y los socios y empresas presuntamente implicados en la falsificación de entradas en el último Clásico disputado en el Camp Nou.

Vives ha explicado que gracias a la información facilitada por un centenar de socios se ha podido llevar a cabo una exhaustiva investigación sobre la trama de falsificación y reventa detectada en el partido de Liga ante el Real Madrid de la pasada temporada. Y que, después de completar el proceso establecido en los Estatutos del Club y de haber informado de lo sucedido al Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, el club ha decidido sancionar a los 2.822 socios implicados en el fraude. Eso sí, se han establecido hasta cinco niveles de castigo diferentes.

Todos con sanción

33 de los implicados será expulsados de forma permanente y definitiva como socios por haber sido reincidentes en la falsificación y reventa de entradas. Esta suspensión implica que no pueden ser abonados y que su carnet se pondrá a disposición de aquellos que están inscritos en la lista de espera para poder serlo. A aquellos socios que formaban parte de la trama pero que colaboraron con club para dar información sobre terceros implicados, un total de 124, la Comisión de Disciplina ha decidido rebajarles la suspensión a seis meses.

Los socios que han resarcido el perjuicio causado (511) serán suspendidos durante 10 meses; los que han reconocido los hechos (481), durante 14, y el resto, hasta 1.673, se quedarán sin su condición de socio durante 18 meses por haberse opuesto a la acción del club o no haber formulado alegaciones. Estas sanciones temporales tendrán como fecha de inicio el próximo 11 de mayo. El Barcelona ha dado 40 días naturales de plazo para que los socios que quieran oponerse a la sanción emprendan la acción correspondiente ante la jurisdicción ordinaria.

Con esta decisión inaudita, el club pretende demostrar su firmeza en la lucha contra el fraude e implantar el principio de responsabilidad social en sus socios. Por eso, desde la directiva se asegura que el Barcelona "continuará trabajando firmemente con el objetivo de acabar con cualquier conducta fraudulenta que pueda afectar la vida del club".