A quince días del inicio del Dakar-2020, del nuevo Dakar en Arabia Saudí, los equipos y pilotos ultiman todos los detalles de una competición que, como gran noticia desde hace ya varias semanas y mayor atractivo, además del cambio de escenario, es la presencia del dos veces campeón del mundo de F-1, ganador de las 24 Horas de Le Mans, del Mundial de resistencia con Toyota y de otras muchas competiciones como es el asturiano Fernando Alonso al que, probablemente, todos ven como ganador y/o animador de muchas etapas pero, difícilmente, como brillante vencedor siendo como es el ‘rookie’, el debutante, más prestigioso de todos los tiempos.
La presencia del Nano ha sido muy elogiada por todos los dakarianos dada, no solo, su enorme popularidad y prestigio, sino también su tremenda capacidad para adaptarse a todo tipo de competición, vehículo y reglamento en cualquier tipo de carreras. Desde que consideró que la F-1 le había dejado de interesar por las enormes diferencias que hay entre los contados coches ganadores y el resto de la parrilla, Alonso no ha cesado de experimentar todo tipo de vehículos, de ahí su nuevo reto, el Dakar-2020.
El gran prestigio de Alonso
"Estamos muy contentos de tener a Fernando Alonso entre nosotros”, ha comentado David Castera, director del nuevo Dakar. “Es una persona con un atractivo muy fuerte y que puede motivar a muchos otros pilotos, de motos, de coches, para hacer el Dakar y eso es muy bueno para nosotros. Pienso que puede ganar alguna etapa, en la segunda semana puede hacer algo especial", vaticina el que fuera copiloto de su compatriota Stepháne Peterhansel, ganador de 13 ediciones y que ha criticado a Alonso por elegir a Marc Coma como copiloto, comentario al que nadie, nadie, se ha sumado, dando el enorme prestigio del campeón catalán de KTM.
Castera, eso sí, cree que el bicampeón asturiano de F-1 "tiene que ser humilde, pues le va a costar un poco adaptarse a una competición automovilística que no tiene nada que ver con las que ha hecho hasta ahora. Tiene que aceptar estar detrás de pilotos menos buenos que él en teoría. Pero tendrá que esperar y tomarse la primera semana poco a poco. Después, creo que tendrá la opción, sobre todo con Coma, que conoce muy bien el rally y que le va a ayudar mucho", añadió el rector del rally del desierto.
“Yo lo dije y se lo dije desde el primer día que me comentó la ilusión que le hacía correr el Dakar, probarse en el Dakar: gracias por venir al rally y, sobre todo, gracias por prestigiar la competición con tu presencia”, señala Carlos Sainz, que volverá a correr con Mini y a ser uno de los grandes favoritos a la victoria. “Fernando se ha preparado concienzudamente, más de lo que yo pensé, con las carreras y los tests que ha hecho. Lo va a tener difícil, pero es una esponja, se adapta muy bien. Quiero y le deseo que tenga el mejor Dakar posible. Ganar el primer año es difícil, pero en el Dakar pueden pasar muchas cosas… aunque es difícil”, señaló el doble campeón de rallys y doble vencedor dakariano.
Otro de los grandes favoritos y ganador del Dakar, el catarí Nasser Al Attiyah, que ha trabajado con Alonso durante las últimas semanas al igual que Giniel de Villiers, considera que Alonso “es un grandísimo piloto, que aprende muy rápidamente y que sabe que el Dakar no tiene nada que ver con lo que ha corrido hasta la fecha”. Para Al Attiyah, “Alonso ha hecho una gran carrera en la F-1, ha sido un grande y creo que hace bien en probar en cross country. Será muy bueno para el automovilismo y para todos nosotros”.
Los elogios de Nani Roma
Para el campeón catarí, Alonso necesitará "más de cinco años para tratar de ganar el Dakar, porque este es un rally, una competición, una especialidad donde la experiencia, no solo en las dunas sino en todo tipo de terreno, es vital, fundamental. De hecho, Al Attiyah lo comparaba con la carrera de Carlos Sainz. "Si te fijas en Sainz necesitó ese tiempo para ganar", comentaba un Al-Attiyah que también avisa que "necesita un gran equipo y creo que lo tiene".
Nani Roma, otro de los grandes ganadores y, por supuesto, candidato también este año al podio del Dakar-2020, considera, en efecto, que “es fabuloso que Fernando haya decidido competir en el Dakar y probarse ante grandes pilotos y equipos. He estado con él, he competido contra él en los últimos meses en las pruebas preparatorias de este nuevo Dakar y puedo decir que acude a él con enorme humildad y sabiendo lo difícil que es ganarlo, no solo porque hace falta experiencia y tener un buen copiloto, que lo tiene, sino no tener mala suerte y, en ese sentido, Alonso sabe que se va a encontrar con un montón de dificultades que ni siquiera puede imaginar ahora”.
Marc Coma, el flamante ganador del Dakar y nuevo copiloto de Sainz, considera “impresionante” la actitud de Alonso y las ganas que tiene de correr el Dakar. “Para mí es maravilloso poder ayudarle en todo lo que sé de esta carrera, aunque yo también soy novato en el otro lado del volante así que no será fácil no”. Para Como, lo más importante “es que ‘Fer’ es una auténtica esponja y aprende muy rápidamente, lo que no significa que estemos para ganar el rally, no, no, pero para algo más que el top-10 si nos vemos, sí”.
Glyn Hall, máximo responsable del equipo Toyota, muestra su sorpresa por la rápida adaptación de Fernando Alonso al coche, al estilo de pilotaje que necesita y a las dificultades que supone el Dakar. “La evolución de Fernando ha superado todas nuestras expectativas. Comenzamos su particular programa de entrenamiento con un objetivo de kilómetros en mente, pero él y Marc han ido mucho más allá en cada uno de los test. Con tan poco de preparación, me ha impresionado mucho su progreso y su determinación. Ya en el primer test demostró de lo que era capaz con dunas extremadamente difíciles y hierba de camello. Este terreno ya puso a prueba a Fernando, que tuvo que superar sus propios límites y decidir cómo actuar".
La inmensa ilusión de Alonso
Alonso, por su parte, reconoce que “como primer objetivo, me gustaría acabar el rally, simplemente. Hay un 60% de abandonos en el Dakar: de cada 10 que salgan, 6 no van a acabar. Ser uno de esos cuatro elegidos que van a llegar a meta ya es un reto complicado, más para mí que no tengo ningún tipo de experiencia. Es también uno de los grandes atractivos de hacer el rally más duro del planeta. Cuando le dije a Toyota que quería seguir entrenando para un posible Dakar, en mi cabeza no estaba ganar sino vivir una experiencia divertida y, sí, acabar lo mejor posible”.
No obstante, tiene claro que esta experiencia le ha hecho crecer, sobre todo como piloto. "Yo cuando pensé en hacer el Dakar fue… ‘Vale, no tengo ni idea de cómo se puede hacer esto, pero vamos a hacerlo. Tengo seis meses para que los test, la vida en general y la gente que me rodean en este proyecto me van a enseñar cómo hacerlo, porque yo no tengo ni idea’. Estos meses me han servido para crecer como persona, gracias a la gente que me he encontrado. Gracias a Marc, a mucha gente. Me siento más preparado. Si hago el Dakar, un 1% de mi cabeza pensará en ganarlo", afirmó, contundente Alonso, el pasado mes de octubre en la presentación de su proyecto solidario ‘Mision Blue’, ideado por su marca de ropa ‘Kimoa’.
