El baloncesto cordobés cuenta con un nuevo campeón de Europa desde hace unos días, concretamente el ala-pívot pontanés de 2,03 Ismael Tamba, pues ganó el Europeo sub 18 de Volos. La victoria ante Turquía en la final (57-53) le sirvió para convertirse en el tercer campeón continental de baloncesto de la provincia tras los pívots Felipe Reyes (júnior y absoluto) y Rafa Blanco (cadete). Tamba promedió 2 puntos y 1,7 rebotes en 4,8 minutos durante el campeonato.

Tamba nació el 19 de julio del 2001 en Cabra, aunque como él mismo reconoce «pasé a vivir en Puente Genil desde pequeñito y soy de aquí». Fue un jugador de formación tardía, pues no estuvo en la selección cordobesa mini de su edad que ganó la corona andaluza en 2013. Con 11 años empezó en el equipo de su localidad y en la campaña 15/16 pasó al cadete del Ciudad de Córdoba, equipo con el que jugó dos años «y empecé a jugar ya en serio al baloncesto».

JUNTO A SU HERMANO / Tras dos años formándose en el Ciudad de Córdoba, Ismael Tamba se marchó al Unicaja junto a su hermano Pablo, que también estaba en el Ciudad de Córdoba. Pablo, que se encuentra estos días disputando el Europeo sub 16 de Udine, se incorporó en 2017 al conjunto cadete malacitano e Ismael al júnior. Por cierto, en el Unicaja seguirán los dos hermanos la próxima campaña.

La gesta de Ismael Tamba en el Europeo sub 18 fue difícil desde el principio, pues entró en la preselección inicial sin garantías de estar en el equipo final. "Lo más duro de todo fueron los 30 días que pasé con tanta tensión sin saber si estaría en la selección definitiva. Desde el primer momento me pidieron que subiera el nivel de dureza en los entrenamientos y en los partidos. Cuando me enteré de que entraba en el equipo del Europeo sentí una sensación de alivio y de premio al trabajo", dice.

"En el campeonato fuimos superiores a los rivales en la primera fase por nuestro mayor talento y hasta los cuartos no empezó el tema a complicarse", asegura el jugador pontanés. Ya en la final, la selección hizo el peor partido del campeonato hasta bien entrado el tercer cuarto. "Nosotros mismos nos metimos la presión de ir de favoritos. Lo dábamos todo pero no salían las cosas. Un golpe de carácter nos sirvió para remontar en el tercer cuarto". Tamba vivió la final casi desde el banquillo, pues jugó 35 segundos. "En el banquillo se vivía mucha tensión y no respiramos hasta los últimos segundos", recuerda Tamba.

El oro europeo considera el pontanés que ha sido "el premio al sacrificio de dejar mi casa".

A la vuelta de Grecia pasó la selección campeona por Torrejón de Ardoz para visitar a la absoluta. "Los jugadores nos contaron como lo vivieron cuando ellos fueron campeones europeos. Pude ver a Marc Gasol que de todos los que están es el jugador al que siempre he seguido más", señala Tamba.

El nuevo oro continental jugará la próxima campaña en el Unicaja de EBA aunque también ayudará en los entrenamientos del equipo ACB. "Espero debutar en algún partido de liga", dice. Mientras, estos días animará a su hermano Pablo para que gane el Europeo sub 16. "Puede ayudar un montón, incluso más que yo", concluye el pontanés.