A los pocos minutos de certificarse la permanencia del Córdoba en Segunda División, una temporada más, el director general deportivo blanquiverde, Luis Oliver, reconoció en los micrófonos de Canal Sur, que le preguntó por los rumores que vinculan a Rubén Castro con el navarro que «me encantaría tenerle en el Córdoba». Oliver ya llevó al delantero canario al Betis en el 2010, justo en el mismo verano en el que el Córdoba tenía firmado a Salva Sevilla y, finalmente, recaló en la entidad blanquiverde, por lo que Oliver aumentó la nómina con el centrocampista, el delantero más Jorge Molina, Chechu Dorado y otros.

No lo tendrá fácil en esta ocasión, ya que tanto el Deportivo de la Coruña como la UD Las Palmas han mantenido contactos con el goleador, aunque quizás una de las ventajas para Oliver se centre en tener en la plantilla actual a un goleador como Sergi Guardiola, del que informó que tiene una cláusula de 10 millones en caso de ser traspasado a un club español y de 15 millones si su destino está en el extranjero. El jumillano, obviamente junto a una cantidad de dinero, podría entrar en la operación por el canario.

Asimismo, Oliver también dio por hecha la continuidad de José Ramón Sandoval al frente del conjunto blanquiverde, aunque desde esta misma semana la negociación tendrá que ponerse en marcha, ya que el de Humanes firmó su compromiso solamente hasta el 30 de junio y ha habido algunos clubs que se han interesado en él y que ya han contactado con su representante, Juanma López.

En cualquier caso, tan complicada será la llegada de jugadores para un proyecto ambicioso como la salida de otros, no pocos, que tienen contrato y con los que no se cuenta.