Diez segundos le faltaron a Rafa Navarro para tener su estreno perfecto en Segunda División, pero N’Diaye le amargó ese debut como técnico en el fútbol profesional. «El partido ha estado bastante controlado, aunque en los últimos segundos hemos cometido un error de infantiles».

Pese a ello, el entrenador cordobés aseguró estar «satisfecho del rendimiento de mis jugadores pese a que nos han marcado en el momento que más duele».

Navarro mostró una aptitud positiva respecto al futuro inmediato de su plantel. «Soy optimista ya que he visto el derroche de mi equipo durante todo el partido y estoy convencido de que vamos a obtener los resultados que esperemos». Regresando al empate de ayer, el nuevo técnico del Córdoba reconoció que el vestuario está «jodido ya que hemos perdido dos puntos importantes». Y ante esta adversidad, Navarro solo propuso una solución: «Debemos levantar cabeza y pensar ya en el próximo partido del Extremadura, que es una auténtica final para nosotros».

A priori era uno de los partidos más complicados de lo que resta de calendario puesto que el Málaga ocupa los primeros puestos de la tabla y es un firme candidato al ascenso a pesar de haber estado varias jornadas sin marcar un gol, hasta ayer. Por eso, Navarro quiso rebajar el drama que podía conllevar este empate. «Hemos jugado contra uno de los equipos más fuertes de la categoría y no hemos perdido la cara al partido en ningún momento y hemos sido mejores».

Ya pensando en el encuentro de la próxima semana en el Francisco de la Hera ante el Extremadura (domingo 10, 16.00 horas), Rafa Navarro insistió en que «no debemos mirar atrás porque los puntos que hemos perdido ya no vuelven y por eso, debemos levantarnos rápido de este golpe y seguir trabajando para conseguir los resultados que queremos», sentenció.

Mucho trabajo es el que tiene Rafa Navarro para recuperar la autoestima de un plantel de cara a esta recta final.