El Mónaco se llevó el primer asalto de la eliminatoria de cuartos ante el Borussia Dortmund, en un duelo vibrante que empezó con un homenaje a Marc Bartra, herido en el atentado de ayer y cuyos compañeros lucieron camisetas con el mensaje: «Mucha fuerza».
El conjunto monegasco dominó el primer tiempo, en el que destacó por su buen juego y por el favor arbitral, ya que el juez de línea no acertó a ver un claro fuera de juego de Mbappé en la acción del 0-1 (m. 19). Minutos antes, Fabinho había desaprovechado un penalti para el Mónaco, en una falta muy dudosa. El Mónaco dominaba al Dortmund, muy impreciso, y asustaba a la contra. Pero el 0-2 llegó tras un error del central Bender, que remató de cabeza marcando en propia puerta.
PULISIC, EL REVULSIVO
Retocó el equipo en la segunda parte el técnico alemán y dio con la tecla. Especialmente por la entrada de Pulisic, un extremo que revolucionó el ataque alemán. De sus botas salieron las mejores ocasiones y una de ellas fue aprovechada por Dembelé para firmar el 1-2 (m. 56).
El Dortmund crecía y el Mónaco se hacía cada vez más pequeño, pero un error defensivo volvió a darle vida. Mbappé aprovechó una mala cesión para establecer el 1-3 (m. 78). No se rindió el Dortmund y Kagawa recortó distancias tras una gran acción (2-3, m.84), dejando la eliminatoria abierta.
