Poca alegría había ayer en El Arcángel, salvo en la cara de un muchacho de Villanueva del Duque, Sebas Moyano, que por fin debutó con el Córdoba. «Estoy muy contento, aunque el resultado es una pena; espero acumular más minutos», comentaba. Sebas notó el apoyo de la afición. «He visto que la gente me animaba por las redes sociales, lo cual es de agradecer. Al principio tenía nervios, pero al entrar ya es un partido más». El canterano notó el salto respecto a la Segunda B. «Mucho más calidad, el salto es grande, pero intentamos acoplarnos». El mensaje de Carrión antes de que saliera a jugar fue sencillo. «Me dijo que disfrutara y que jugara como sabía, que las ocasiones iban a llegar, que estuviera tranquilo». Sebas dedicó el debut a dos personas. «Me he acordado sobre todo de mi padre y de mi madre, que son los que más me apoyan».