El fútbol está salpicado de déjà vu. ¿Casualidades o fuerzas profundas? Hay una relación entre futbolista y superstición. Los hay exagerados. Johan Cruyff antes de cada partido tenía que propinarle un pequeño golpe en el estómago a su portero y escupía el chicle hacia la mitad opuesta del campo. Si faltaba alguno de estos rituales, al flaco le invadía la ansiedad como si encontrase el estanco cerrado.

La conjura más conocida en el fútbol sucedió a comienzos de los años 60. El Benfica acababa de encadenar dos títulos de la Copa de Europa, tras vencer en 1961 al Barcelona que entrenaba Enrique Orizaola (padre del que fuera presidente del Córdoba) y al Real Madrid en 1962. A su entrenador, Bela Guttman, se le ocurrió solicitar un aumento salarial; no solo se lo negaron, lo despidieron. Fue entonces cuando Guttman lanzó una maldición: «Sin mí, el Benfica no ganará un título europeo en 100 años». Ya suma 58.

Al Córdoba le costó romper la maldición del partido de las 12.00. Hasta cinco años tuvieron que pasar para que, el pasado febrero contra el Valladolid, los blanquiverdes se impusiesen en un encuentro a la hora del vermuth. Ayer emergieron dos nuevas simultaneidades. Casi al tiempo que el club blanquiverde presentaba a su nuevo entrenador, Curro Torres, debatían en televisión los candidatos a presidir la Junta de Andalucía. Tres años atrás, el 17 de marzo del 2015, los presidenciables Susana Díaz, Juanma Moreno y Antonio Maíllo elevaban también el clima de tensión en un debate televisado camino de las urnas; y ese mismo día, el Córdoba anunciaba la destitución de Miroslav Djukic.

Otra casualidad. Coca Cola lanza cada año un almanaque de pared del Córdoba CF en el que cada mes tiene a un par de jugadores como protagonista. Noviembre viene ilustrado con Jovanovic y Jaime Romero. Los blanquiverdes han disputado dos partidos en casa este mes. En el primero de ellos se impusieron por 4 goles a 2 al Extremadura, con tantos de… Jovanovic y Jaime Romero; el pasado domingo, a los 12 minutos dos jugadores abandonaron el campo por sendas lesiones… ¡albricias!, Jovanovic y Jaime Romero. La afición ahora desea que Curro Torres tenga en su poder la fórmula contra esos sortilegios, y que no sea tan secreta como la de la chispa de la vida.