El español Jorge Lorenzo (Ducati Desmosedici GP18), que se fue por los suelos junto a su compañero de equipo Andrea Dovizioso y el español Dani Pedrosa (Repsol Honda RC 213 V) vio "acertada" la decisión del Panel de Comisarios de considerar el incidente un "lance de carrera", para añadir que "ahora cada piloto tiene que valorar qué ha hecho mal en esa acción".

"Es una pena que todo el mundo se quede con esta acción, porque ha sido una carrera preciosa y por mí creo he hecho un 'carrerón', sinceramente, pero valorando la acción para mí ha sido una auténtica mala suerte para los tres, justamente porque somos los tres pilotos más limpios del campeonato, tres pilotos que casi nunca estamos en este tipo de acciones y, justamente hoy (por ayer), nos ha tocado a los tres terminar la carrera así", lamentó Jorge Lorenzo.

"Repito, un auténtico caso de mala suerte y no quiero entrar a valorar de quién ha sido la culpa por los nombres de los afectados, los nombres de los que nos hemos caído; si fueran otros pilotos entraría a valorar, pero ahora no quiero discutir de quién ha sido la culpa y estas cosas", incidió el piloto de Ducati.

Al referirse al incidente en sí, narró que "Andrea me ha pasado, se ha ido largo, yo le he vuelto a pasar por el interior y, de repente, en milésimas, he visto un impacto con Dani y no he podido evitar la caída; todo ha sido como un efecto dominó".

Al ser preguntado por su estrategia para la carrera y la elección de neumáticos, pues fue el único que montó neumático blando delante, Jorge Lorenzo dijo que "la rueda delantera estaba aguantando perfectamente y, como dije ayer, es una de las suertes que tenemos, que quizás sea la moto que mejor conserva el neumático delantero y que te permite ir con un neumático más blando que los de los demás".

"Estaba aguantando muy bien y si en Austin quizás me equivoqué, aquí elegí las ruedas perfectamente, la cuestión es que, cuando perdemos adherencia detrás, el problema que tenemos de giro aumenta un poco, o bastante, y ahí Marc era superior", continuó.

"Cuando teníamos adherencia les costaba mucho adelantarme, por eso tenemos que intentar ganar ese giro y así cuando el neumático trasero baja no notamos tanto la falta de giro en las curvas", agregó Lorenzo.

"Ahora espero llegar a Le Mans y ser, como mínimo, igual de competitivo que aquí, y en Mugello y Montmeló también pues son grandes pistas para nosotros, a pesar de cómo ha terminado esto nos da un gran empujón de moral, sobre todo a mí, porque había conseguido tres resultados muy decepcionantes", reconoció el piloto de Palma de Mallorca.

"Esto me da mucha más moral para seguir y tirar para adelante, ya que hemos podido comprobar que cuando la moto tira un poco más hacia mi estilo, es más fácil que los resultados lleguen y eso nos tiene que dar la convicción de que se puede conseguir en el futuro", manifestó el deportista de Ducati.