Nadie falla en la Premier. El pulso se hace cada vez más duro, lleno de tensión entre los dos equipos que pelean por el título. El City defiende el trono conquistado la pasada temporada, mientras el Liverpool aspira a besar un trofeo que no ha visto tan de cerca en los casi 30 últimos años.

Gana primero el equipo de Guardiola en el campo del Crystal Palace (1-3) guiado por un gran Sterling, que fimra dos goles, y minutos más tarde replica el conjunto de Klopp imponiéndose en Anfield al Chelsea de Hazard (2-0) en la que tarde en que brilló Salah con un maravilloso zurdazo que batió a Kepa.

Todo sigue igual en la Premier. Quedan cuatro jornadas para acabar el campeonato y domina el Liverpool, con 85 puntos. El City tiene 83, dos menos. Aunque al equipo de Guardiola le queda una jornada más. El duelo mantiene a Inglaterra en tensión convirtiendo cada jornada en una auténtica final porque un mínimo resbalón tendría efectos terribles. La tarde empezó con el triunfo del City en uno de los escenarios más complicados. De ahí, que el extécnico del Barça apostara por su mejor once, con De Bruyne y Sané, que fueron suplentes en la Champions contra el Tottenham, consciente de lo que se jugaba.

DE STERLING A SALAH

El tanto inicial de Sterling tras una gran asistencia de De Bruyne (m. 15) tranquilizó al City, que luego dominó aún más el partido gracias al segundo de Sterling (m. 63). Aunque el Crystal Palace con un excelente lanzamiento de falta de Milivojevic (m. 81) añadía suspense al partido. Tuvo que aparecer en el último suspiro De Bruyne para firmar otro gran pase a Gabriel Jesús que sellaba el 1-3 definitivo para meter presión al Liverpool.

Respondió bien el líder aunque le costó, especialmente en la primera mitad donde no encontraba los atajos para superar al Chelsea. En apenas dos minutos, el Liverpool reaccionó gracias al gol de Mané (m. 51) y el fantástico zurdazo de Salah (m. 53) para alivio de Klopp. Fantástico y lejano porque Kepa, el exportero del Athletic, no llegó a tiempo.