Después de hacer llegar a los clubes el protocolo para regresar a la competición y de haber citado a los futbolistas el próximo martes y miércoles para hacer los primeros test de coronavirus, La Liga ha retrasado las primeras pruebas al menos una semana, al tiempo que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, advertía de la necesidad de un permiso gubernamental para que empiece a ejecutar el protocolo para el deporte.

La primera batería de test masivo a los futbolistas y miembros de los clubes que están en contacto con ellos es el primer paso para volver a los entrenamientos, al menos quince días desde la primera prueba de control a los equipos.

Con este atraso, La Liga de Javier Tebas le da margen al Gobierno para rebajar las limitaciones de la cuarentena y que se anuncie, en alguna medida, la vuelta a los entrenamientos de los deportistas profesionales.

Después de las primeras polémicas tras el anuncio de las pruebas, con la negativa de los jugadores del Racing de Santander, la asociación de futbolistas AFE ha solicitado este viernes al ministerio de Sanidad que aclare la capacidad de los clubes para realizar pruebas para detectar el coronavirus.