El jugador del Córdoba CF Futsal Antonio Rivera Koseky fue protagonista, junto al resto de sus compañeros, de la gran remontada de los de Maca ante el Real Betis en Sevilla. El prieguense marcó el gol de la sentencia en el segundo partido, el del empate en el tercero y también el penalti que supuso el pase del Córdoba CF Futsal a la final del play-off y que desató la consiguiente alegría en los 500 cordobesistas que se desplazaron al San Pablo. Aunque, al igual que su equipo, Koseky sigue con los pies en la tierra antes del duelo determinante.

-¿Cómo afronta esta final del play-off

-Mucha ilusión porque es un fin de semana especial puesto que una final de play-off no se disputa todos los años por desgracia. A todos nos pilla de nuevas y será una experiencia bonita para nosotros. Tenemos muchas ganas de que llegue el partido mañana (por hoy) y competir, luchar, ver una fiesta en Vista Alegre muy colorida.

-¿Cómo han afrontado la semana en el grupo tras la gesta de Sevilla?

-Tras lo conseguido en San Pablo, el lunes estuvimos de descanso y ya el martes volvimos al ritmo de trabajo semanal. Maca ya nos recomendó que volviéramos a la realidad, al trabajo, a lo que somos nosotros, lo que nos ha hecho llegar hasta aquí. En los entrenamientos se ve esa chispa de lo que nos estamos jugando. Muy ilusionados, pero con los pies en el suelo.

-Maca se ha encargado de devolveros a la Tierra.

-Sí. Antes de la sesión nos felicitó por nuestro triunfo en Sevilla, pero rápidamente nos advirtió de que aún quedaba un paso todavía más importante. El martes cambiamos el chip, pasamos de pensar en el Betis al Mengíbar y llevamos toda la semana trabajando con vistas al partido de mañana.

-Marcó un gol en el segundo partido, otro en el tercero y el penalti decisivo en Sevilla. ¿Ha tenido el móvil saturado?

-Nunca viví algo parecido. Salió todo muy bien pero intenso. La mayoría de nosotros no estamos acostumbrados a esto y se ha notado que han sido unos días intensos pero muy bonitos. Tuve la suerte de marcar el penalti, pero podía perfectamente haber sido otro compañero. Tuve muchas felicitaciones en los días posteriores, algo a lo que no estoy acostumbrado, pero lo llevamos bien, con la mayor normalidad posible. Aun así, se lo debemos todo a la afición, que nos lleva en volandas todos los partidos. Estoy muy contento por todo lo que ha pasado.

-¿Han podido hablar sobre la expectación que se ha generado?

-Desde que salieran a la venta las entradas el pasado martes ya éramos conscientes del ambiente que se está gestando. Cuando llegamos a entrenar, dos horas después ya vimos un montón de reacciones en las redes sociales y las entradas estaban volando en cuestión de horas. La gente está volcada con nosotros.

-Desde los años 80 no hay equipos de Córdoba en la máxima categoría, por eso hay muchas ganas de ver fútbol sala de máximo nivel.

-Sí. La ciudad está volcada, con muchas ganas de que llegue el sábado y se genera dado que ha pasado mucho tiempo que Córdoba tiene ganas de fútbol sala de Primera.

-¿Qué se espera de Mengíbar?

-Una eliminatoria muy igualada e intensa. Mengíbar es un equipo muy trabajado y por eso espero muchísimas dificultades. No será una eliminatoria más sencilla que ante el Betis por mucho que se pueda pensar. Nos espera una guerra y cuando vayamos allí, más de lo mismo. Somos conscientes de que Mengíbar es un equipo que ha llegado hasta ahí por méritos propios. Sus puntos fuertes son muy buenos y debemos contrarrestarlos de la manera que hemos trabajado durante la semana.

-Los precedentes de los partidos de esta temporada, ¿os han dado qué pensar?

-Siempre están presentes. Tanto en Vista Alegre como en Mengíbar nos ganaron, pero estamos en un momento de la temporada diferente. Creo que nosotros hemos dado un paso al frente en cuanto a mentalidad, trabajo físico y aunque lo tengas en el recuerdo, no será definitivo. Recuerdo que el partido de Córdoba se decantó hacia ellos por detalles, mientras que en Mengíbar nos fuimos al descanso ganando 1-2. Ya en la segunda se abrió el marcador, pero los dos partidos estuvieron igualados.

-Tras el partido de Vista Alegre ante el Real Betis, Maca comentó, en cierta medida, que el enorme ambiente del pabellón hizo contraer al equipo. Ese factor ya lo tenéis superado aunque Vista Alegre vuelva a llenarse.

-Esta experiencia es nueva para nosotros. Quizás en la primera parte ante el Betis en casa pudo cogernos el pulso por el ambiente, pero también por la magnitud del rival al que nos enfrentábamos. Con un plantel increíble y la gran magnitud de ese club, pero después en la segunda parte ya propusimos el juego que queríamos nosotros. Ya no te cuento los partidos que disputamos en Sevilla, tanto el viernes como el domingo. Ese problema no creo que nos vuelva a ocurrir puesto que estos partidos los afrontaremos de la manera que se deben encarar.

-Fueron a Sevilla con prácticamente todo partido y sacaron una gran arma de este equipo: su capacidad de superación.

-No me sorprendo porque llevo todo el año con mis compañeros y sé cómo se las gastan, pero como grupo hemos demostrado superar cualquier adversidad y dificultad. En Sevilla salió nuestra casta y ganas de seguir compitiendo y de mejorar por parte de cada uno. Hemos crecido mentalmente mucho como equipo.

-¿La Feria este año se presenta complicada?

No he encontrado sitio, momento y día para pisarla. Si algún día consigo ir será un pasito y para casa. La cosa está más complicada, pero a ver si podemos ganar los dos primeros partidos y qué mejor manera de celebrarlo que en la Feria de Córdoba. Ni lo planteamos siquiera.

-Acaba de mencionar otro de los rasgos de este Córdoba Futsal: el partido a partido.

Exacto. No pensamos más allá del partido de mañana (por hoy). Somos quienes somos, sabemos de dónde venimos, sumos humildes y en ese aspecto lo que queremos que llegue el partido, que se quede el primer punto en Vista Alegre y ganar el segundo punto en el segundo partido o si es necesario, en el tercero como sucedió en Sevilla. Pero no pensamos más allá que en el partido de Vista Alegre, que será de una dificultad extrema. Nosotros, poquito a poquito es como hemos llegado hasta aquí.