La demanda judicial que interpuso el equipo de fútbol femenino de Estados Unidos, en la que exigía a la Federación estadounidense igualdad salarial respecto a la selección masculina, ha sido desestimada por un juez federal, aunque las actuales campeonas del mundo ya han anunciado que apelarán la decisión.

El magistrado Gary Klausner no ha estimado la demanda de discriminación salarial de la selección femenina estadounidense. "El equipo nacional demenino ha recibido más pagos acumulados por partido que el masculino durante el período entre 2015 y 2019", refleja el sumario.

Aunque el juez ha dictaminado que las jugadoras no reciben el mismo trato que los hombres cuando se trata de viajes, capacitación, viviendas y otras áreas; también refleja en el fallo que las futbolistas desestimaron una oferta federativa para igualar la brecha que ha motivado la denuncia. En ese momento, la selección femenina reclamaba 66 millones de dólares.

Pelea firme

"Estamos decepcionadas, pero no renunciaremos a nuestro lucha por la igualdad salarial. Nos mantenemos firmes en nuestro compromiso de garantizar que las niñas y mujeres que practiquen este deporte no sean minusvaloradas por su género", aseguró Molly Levinson, una portavoz de las jugadoras.

La pelea por la igualdad salarial del equipo nacional femenino americano viene de lejos y las reivindicaciones han sido constantes. Después de ganar a Países Bajos para conseguir su cuarto título de la Copa Mundial el verano pasado, en el estadio sonaron cánticos de "Equal Pay, Equal Pay (igualdad salarial)". La capitana del equipo, Megan Rapinoe, qué apareció este jueves con el aspirante a candidato presidencial demócrata Joe Biden, tuiteó tras la sentencia: "Nunca dejaremos de luchar por la igualdad".