Detrás del número hay algo más. Mucho más. Juan Castro (León, 1990) firmó con el Ángel Ximénez Puente Genil su gol número 700 en la Liga Asobal, la máxima categoría del balonmano español. "Nunca me planteé ese tipo de objetivos ni he prestado excesiva atención al tema de los goles porque lo veo más como una consecuencia que como la parte principal", declaró el jugador a través de los canales oficiales del club tras ese logro estadístico. Hasta llegar a esa cantidad, Castro se ha labrado una sólida reputación como jugador profesional en el campeonato.

Modesto y realista, el central es una de las referencias de Paco Bustos en el Ángel Ximénez, el único club de Andalucía en la élite masculina de este deporte y protagonista de la mejor temporada de sus ocho años de historia en la Asobal. La entidad pontana vive días de gloria por motivos como la voracidad goleadora de Castro, que logró su récord en la última jornada. Su equipo doblegó al histórico Fraikin Granollers, que marcha tercero, por 31-24 y él puso su sello a seis tantos.

Castro se ha ganado un lugar entre los iconos de la afición del Ángel Ximénez Puente Genil, que en este curso extraño de pandemia y gradas vacías añora contemplar en directo las exhibiciones del leonés, que es en la actualidad el máximo goleador de su equipo con 98 tantos en 21 partidos, a un promedio de 4'67. En el ranking general de la Liga Sacyr Asobal está situado en la décima posición en el top de anotadores, que encabeza con 130 goles Jorge Serrano, del Recoletas Valladolid.

En su tercera temporada consecutiva en el pabellón Alcalde Miguel Salas, Juan Castro ha conseguido enraizar en un club singular por su filosofía y su capacidad de supervivencia en un entorno complicado. En Puente Genil, un municipio de la Campiña Sur cordobesa con algo más 30.000 habitantes, el balonmano es una seña de identidad y el abanderado de toda la provincia y de la comunidad andaluza. Por encima de momentos duros y crisis variadas, el Puente Genil ha mostrado su capacidad de resistencia. En el actual curso ha dejado cumplido su objetivo principal, la permanencia, y mira con fundada ilusión su participación en la próxima edición de la Copa del Rey, que le emparejará en los cuartos de final el 5 de marzo con el Fraikin Granollers en el Wizink Center de Madrid. Otro buen escaparate para el talento de Castro, que admite que "los goles dependen mucho de la posición del campo, que pueden hasta engañar en cuanto al rendimiento de los jugadores, así que me lo tomo como algo anecdótico".

Un trienio en Puente Genil

Con la zamarra pontana, Castro ha conseguido casi la mitad del total (339) de sus goles en la Asobal. El resto los obtuvo en el BM Logroño La Rioja (62) -donde estuvo una temporada-, Helvetia Anaitasuna (145) -en el que militó durante dos-, el BM Torrevieja (21) -un curso- y el club donde creció y debutó en la Liga Asobal, Abanca Ademar León (133). El destino ha querido que este jueves el Ximénez visite al cuadro leonés en su Palacio de Deportes, en una cita que para Castro siempre guarda un valor sentimental especial.

"Estoy contento por llegar a los 700 goles porque a esa cifra no llega todo el mundo, pero ya el año pasado hice los 600, algo que alegra siempre y cuando ayude al equipo a conseguir los objetivos que se plantean", ha manifestado Castro. Viendo su logro individual y el rendimiento colectivo del Ángel Ximénez, cabe concluir que estará feliz.