El presidente de LaLiga, Javier Tebas, matizó ayer las declaraciones realizadas la pasada semana en las que señaló al Córdoba por «pagos irregulares» a futbolistas e indicando que podía haber «hasta descenso». En una entrevista concedida al diario AS, Tebas dice ahora que «no hay riesgo de descenso. La reincidencia es un factor fundamental y ése no es el caso», aunque avisa de que «pueden tener sanciones muy graves». Aunque no quiere reconocer que se refiere al Córdoba, el presidente de LaLiga avisa también de que «puede haber algún expediente disciplinario más” en Segunda División en base a las auditorías por el control económico que establece la patronal de clubs.

No deja de ser llamativo que el presidente de LaLiga, en estas nuevas declaraciones adujera a dicho control económico y cómo se materializa: «Cuando es necesario, pedimos auditoría para que se haga a través del Consejo Superior de Deportes para ver qué circunstancias hemos podido detectar por otras informaciones que hemos podido tener», dejando así entrever que alguna solicitud de auditoría al CSD, como la que se le hizo al Córdoba y que adelantó este periódico, puede llegar justificada por informaciones externas.

En cualquier caso, Javier Tebas empieza a matizar lo declarado hace apenas ocho días. Ya por la tarde del pasado lunes, el presidente de LaLiga aseguraba a los más cercanos que lo reflejado en la publicación, según su opinión, no se ajustaba a lo que él había declarado, por lo que ese mismo entorno no descartaba en estos días algún tipo de matización o incluso rectificación. Así se produjo ayer, ya que Tebas justificó que esas declaraciones, realizadas al suplemento Actualidad Económica del diario El Mundo, se produjeron en el «contexto del control económico». Esa nueva impresión de Tebas se produjo, al parecer, tras escuchar completa, de nuevo, la grabación de la entrevista que levantó tanto revuelo entre la afición blanquiverde y en el propio club, que un día y medio después emitió un comunicado que no dejaba lugar a ninguna duda, defendiendo la gestión del mismo desde la llegada de Jesús León y asegurando que también protegería el «buen hacer» y el honor de la propia entidad blanquiverde.

Ahora, y siempre en base a esas sanciones que pueden recibir algunos clubs -nunca el descenso administrativo-, en Segunda habrá quien tenga que responder con una multa económica que puede llegar a los 300.000 euros, a la reducción en un porcentaje del límite salarial para la próxima temporada o incluso a la imposibilidad de fichar el próximo verano.