La sala de prensa del pabellón Alcalde Miguel Salas acogió una de las despedidas más difíciles de los últimos años en el Ángel Ximénez. El coordinador de bases, miembro del staff del equipo Asobal y jugador del filial, Javi Ollero, dijo adiós a la entidad para emprender un nuevo proyecto profesional en su localidad natal, Moguer.

Javi Ollero cierra su segundo ciclo en el club (2015-2020), al que regresó para ocupar el puesto de segundo entrenador del primer equipo. Su segunda etapa tuvo lugar entre los años 2007-2011 como jugador, donde consiguió el ascenso a División de Honor Plata.

Sin embargo, el papel más importante de Javi Ollero en Ángel Ximénez ha sido el de coordinador de la cantera. Su enorme labor le convirtió en una pieza fundamental en el club pontanés, relanzando el trabajo de las bases y escuelas deportivas.

Mariano Jiménez, el presidente, lamentó la marcha. "Hoy es un día triste porque Javi Ollero es ese jugador que nadie quiere perder, ese entrenador que no queremos que se vaya. Y es que para nosotros Javi no se irá nunca porque siempre será de Ángel Ximénez", dijo.

Arropado por el presidente y por el equipo Asobal que aguardaba a las puertas de la sala de prensa, Javi se dirigió a los allí presentes para mostrar su agradecimiento por todos estos años dentro del club.

"A partir de este año no voy a estar vinculado al club laboralmente, pero sí de sentimiento porque llevo aquí muchos años. Ha sido una decisión personal y agradezco al club que la entienda, ya que voy a enfocar mi vida laboral a un nuevo proyecto empresarial", explicó. "Quiero dar las gracias a este pueblo, al club, a los entrenadores, a los papás y mamás de los niños de nuestras bases y a todas las personas que me han ayudado en este trabajo día a día", añadió.