Valteri Bottas se anotó la segunda pole de su carrera gracias, sobre todo, a las banderas amarillas provocadas por una avería en el Haas de Romain Grosjean, que impidió realizar el segundo y definitivo intento con neumáticos nuevos a los diez mejores. El gran perjudicado del día fue Lewis Hamilton. El inglés había cometido un pequeño error en el primer intento que le dejaba tercero y no tuvo oportunidad de enmendarlo. Arrancará octavo en virtud de una penalización de cinco posiciones en la parrilla por cambiar la caja de caja cambios.

Parece, en principio, una carrera propicia para que Sebastian Vettel —arranca en la primera línea junto a Bottas— pueda colocar algún punto de ventaja sobre su gran rival al título, Lewis Hamilton. “Será una carrera mu larga, muy dura con Valteri porque marcó un gran ritmo el viernes”, explicó Vettel, fastidiado por no haber firmado la pole, pero contento de ver a Hamilton en problemas. “No pude mejorar mi vuelta porque no hubo un segundo intento, pero de todas formas con la penalización no iba a salir delante, pero voy a trabajar a fondo para entrar segundo y formar un doblete con Valteri”, dice Hamilton, el único entre los diez primeros que no arrancará con el neumático ultrablando, sino que lo hará con el superblando —más resistente en un circuito muy exigente con las gomas— en una estrategia que le debería ayudar a remontar frente a los Force India, Red Bull y Ferrari. “Espero que funcione”, dice el tricampeón del mundo inglés.

Hamilton quiere remontar, Vettel aspira a sacar más ventaja sobre el piloto de Mercedes y el poleman, Valteri Bottas dice que “no tengo otro objetivo que ganar”, mientras su jefe Toto Wolff, le anima diciendo que “está ganándose la renovación”. Esa lucha por el mundial, por la victoria, podría animarse aún más si las predicciones se cumplen y la lluvia hace acto de aparición sobre el circuito Red Bull Ring, en Spielberg, entre las montañas austriacas de Estiria. De esa lluvia se beneficiarían los Red Bull y también Carlos Sainz.

"Es una faena pero no pude marcar tiempo con el único set neumáticos nuevos en la Q-3 por culpa de las banderas amarillas”, explicó el madrileño que pasó a la Q-3 con el quinto mejor tiempo e iba camino de hacer su mejor clasificación del año. “Desde los libres tres vi que tenía posibilidades de hacer algo bueno porque elegimos el set up justo, pero no pudo ser”. El objetivo del madrileño es acabar entre los siete primeros “en un circuito en el que creíamos que no íbamos a ir bien. Pero hay que valorar en su justa medida lo hecho en la clasificación” porque, entre otras cosas, su compañero Daniil Kvyat, no pasó a la Q-3”.

Fernando Alonso, por su parte, completó otra impecable clasificación desde el punto de vista del piloto, sin un solo error, y por delante de su compañero, aunque ninguno de los dos hombres de McLaren Honda pudo pasar a la Q-3. “La sensación es muy buena, he completado vueltas muy buenas, hemos sacado todo el partido al coche, no había más donde exprimir y me quedo con buenas sensaciones en cuando a conducción”, explicó el asturiano tras firmar la duodécima posición. “Ayer por la noche me dijeron que había un problema en el motor, y que volvíamos a la especificación anterior, al motor de Bakú, por eso insisto en que estoy contento con mi conducción”, aseguró el bicampeón del mundo que no se libró de los problemas mecánicos durante la clasificación: En la Q-1 teníamos problemas con el caudalímetro, pero después volvió a la normalidad”, desveló. La duodécima posición es lo máximo a lo que puede aspirar el McLaren Honda con todos los coches en pista, así que Alonso espera una carrera “durilla”.